Las organizaciones sindicales internacionales que asisten esta semana en Nairobi a la Asamblea de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente reclaman un esfuerzo mundial urgente para abordar el problema de la basura marina, la contaminación por plásticos, las sustancias peligrosas y los desechos tóxicos. La declaración conjunta de la CSI, la CSI-África, la UITA y la ITF destaca la interrelación que existe entre la protección del medio ambiente, el trabajo decente y la erradicación de la pobreza, así como el potencial de la tecnología verde para contribuir a la igualdad de género y los derechos humanos.
«Millones de personas dependen de los océanos y los mares para su subsistencia y los alimentos que estos producen están cada vez más contaminados por microplásticos; ello supone una amenaza a la seguridad alimentaria, el empleo y el medio ambiente marino. Reclamamos leyes nacionales, dentro de un marco global, para prohibir y eliminar las sustancias peligrosas y proteger a los trabajadores y consumidores. Los Gobiernos deben asumir sus responsabilidades normativas y hacer frente a las empresas químicas, que retrasan y frustran la sustitución de productos químicos tóxicos que provocan cáncer y otros trastornos, por alternativas que no causan muertes ni enfermedades en el trabajo ni en la comunidad», dijo la Secretaria General de la CSI, Sharan Burrow.
Tras las sesiones preparatorias de la Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente, el órgano decisorio sobre medio ambiente de más alto nivel del mundo, comenzará el segmento de alto nivel de la reunión, del 11 al 15 de marzo.