La Corte Suprema de El Salvador «celebró» el 8 de marzo poniendo un fin tardío a tres condenas vergonzosas de 30 años de prisión contra mujeres que tuvieron abortos espontáneos, por lo tanto, según las leyes locales culpables de asesinato.
La Corte ha reducido las sentencias – definidas como «irrazonables» – al período que las tres mujeres ya pasaron en prisión, más o menos 10 años.
En El Salvador, el aborto está prohibido en todas las circunstancias y es equivalente al crimen de asesinato. Luego de los tres mujeres puestas en libertad el 8 de marzo y una cuarta que regresó a la libertad en febrero, otras 18 «homicidas» permanecen en las cárceles del país.
Traducido del italiano por Michelle Oviedo