Fue durante el Acto 14 de los Chalecos Amarillos, que tuvo lugar el sábado 16 y el domingo 17 de febrero, que Pressenza se reunió con Philippe De Veulle y David Libeskind, abogados del Colegio de Abogados de París, fundadores de «Trajes Negros y Chalecos Amarillos«.
Aquí están sus comentarios durante nuestro intercambio:
Philippe De Veulle: Hoy en día tenemos 25.000 miembros y más de cien abogados en Francia. Estuvimos con los Chalecos Amarillos desde el principio porque vemos que la vida en Francia es muy difícil. Necesitamos oxígeno para vivir y también reformas institucionales para que los ciudadanos puedan participar activamente en las decisiones importantes de nuestro país. Participamos en todas las Actas de los GJs y creamos este colectivo, porque hubo muchas irregularidades, violaciones de derechos, brutalidad policial.
David Libeskind: En el grupo «Trajes Negros y Chalecos Amarillos» ofrecemos información legal gratuita, compartimos información y vídeos, respondemos a las preguntas de la gente y orientamos a las personas arbitrariamente arrestadas, heridas, etc. a abogados locales de las provincias.
La ley contra los manifestantes aún no ha sido aprobada definitivamente, debe volver al Senado el 15 de marzo. Se trata de una ley que incluye disposiciones que no se ajustan a la Constitución, en particular en lo que respecta a la posibilidad de que los prefectos prohíban a alguien asistir a una manifestación por adelantado. Creo que cuando esta ley se apruebe definitivamente, será remitida por 60 parlamentarios al Consejo Constitucional, que, en mi opinión, la censurará.
Los expedientes presentados ante los tribunales están vacíos, hay testimonios falsos, informes policiales falsos, etc., para la mayoría de los casos se trata de detenciones ilegales. Pero incluso si hay una tendencia a que la represión judicial sea menos severa, todavía hay sentencias severas. No debemos renunciar a nada, debemos seguir manifestándonos, debemos luchar. Usted debe demandar si un agente de policía le hace daño, y no dude en presentar una denuncia ante la Inspección General de la Policía Nacional (IGPN), o ante el fiscal.
El gran debate fue organizado por el poder ejecutivo, así que no esperamos mucho. De hecho, lo que se propondrá, en mi opinión, serán unas cuantas medidas y las exigencias de los chalecos amarillos no se cumplirán, por lo que seguirán manifestándose.
Los Chalecos Amarillos son un movimiento revolucionario y mundial. Tal vez el movimiento se agote, pero nos enfrentamos a un torrente que, pase lo que pase, reaparecerá en los próximos meses o años. Los ciudadanos quieren participar en las decisiones políticas del país, en el ejercicio del poder político y hasta que eso ocurra, seguirán haciéndolo.
Soy bastante optimista porque se trata de un movimiento que lleva varios meses en marcha, la gente está muy, muy motivada y el espíritu de los chalecos amarillos siempre estará ahí.
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