Señalo este video muy cáustico con el que nuestro socio Manlio Dinucci, en colaboración con otro socio nuestro, Pandora TV, presenta un resumen de HECHOS DOCUMENTADOS que oponen a la fuerza de la razón a la sin-razón de la fuerza que los Estados Unidos están extendiendo por todo el planeta.
Ataques desesperados, tanto ilegales como peligrosos, de un imperio que está en caída libre en lo político, económico y, sobre todo, moral; un imperio que aún permanece en pie solo gracias a la amenaza armada de 686 bases militares en 74 países (datos recaudados al 2015, Departamento de Defensa de los Estados Unidos) y con el excesivo desembolso financiero mundial basado en SWIFT, icebergs de los cuales las sanciones económicas ilegales e inhumanas representan solo la punta.
La población estadounidense y europea está siendo bombardeada constantemente por los principales medios de comunicación con una serie de falsas tonterías, necesarias para intentar mantener un consenso popular sobre las decisiones criminales de los líderes estadounidenses y sus patrocinadores europeos.
Este tipo de manipulación ya funcionó con la ex Yugoslavia hace 20 años, cuando el «compañero» Massimo D’Alema, primer ministro y el viceprimer ministro Sergio Mattarella violaron penalmente nuestra Constitución y todo el cuerpo de derecho internacional al librar una guerra sin una orden judicial. ONU: ¿también es engañada o es cínicamente cómplice? Pero parece que a Mattarella le gustó ver sangre ya que en el gobierno posterior D’Alema II, asumió el Ministerio de «Defensa»…
Y mientras que hoy, acerca de lo que ocurre en Venezuela, D’Alema permanece en silencio, Mattarella, convertido incluso en «supremo garante» de la constitución que él hizo sangrar, sopla sobre el fuego de la agresión de los Estados Unidos fortaleciendo las falsedades de los principales medios de comunicación y, además, golpeando a los que no se postran en la corte del imperio.
Con la mismísima evasión masiva, fuimos arrastrados a los genocidios criminales de Irak, Afganistán, Libia, Siria y en todas las hostilidades menos llamativas pero igualmente criminales relacionadas con las llamadas «primaveras árabes», Egipto en primer lugar.
Por no hablar de Ucrania y otros más.
Cada uno de nosotros está llamado, sin más demora, a defendernos ante el tribunal de la conciencia. El abogado defensor advierte no citar periódicos, televisiones, tablets, teléfonos celulares y cualquier otra cosa en su defensa: sería un grandioso auto-gol, mostrando una falta total de juicio crítico… a menos que no se quiera jugar la carta desesperada para la absolución por enfermedad mental permanente.
Traducción del italiano por Michelle Oviedo