Por Alejandro Ochoa
De acuerdo con el Artículo 71 de la Constitución venezolana en su primer párrafo: «Las materias de especial trascendencia nacional podrán ser sometidas a referendo consultivo por iniciativa del Presidente o Presidenta de la República en Consejo de Ministros; por acuerdo de la Asamblea Nacional aprobado por el voto de la mayoría de sus integrantes, o a solicitud de un número no menor del diez por ciento de los electores y electoras inscritos en el registro civil y electoral».
A partir de esta base legal, nosotros, los abajo firmantes, ciudadanos venezolanos preocupados por la situación política reinante y totalmente opuestos a injerencias extranjeras para la solución de los problemas que nos aquejan, como una medida para resolver el enfrentamiento paralizante, dañino e inútil que sufrimos en la actualidad, y así prevenir un posible derramamiento de sangre y empeoramiento de la situación económica, apoyamos la celebración de un referéndum consultivo para formular dos preguntas al pueblo venezolano: una, si estarían de acuerdo con la celebración de nuevas elecciones presidenciales y legislativas, en un lapso de 90 días, en términos que deben ser acordados en un plazo de dos semanas entre representantes del Gobierno presidido por el Presidente Nicolás Maduro y de la oposición, con la mediación de las Naciones Unidas; y dos, si estarían de acuerdo con el nombramiento de una comisión independiente de expertos, de duración limitada, con representantes internacionales y nacionales, tanto del Gobierno como de la oposición, la cual tendría como misión definir una estrategia para enfrentar la crisis económica del país. Tal estrategia sería acordada previamente por las partes y debería ser seguida tanto por el Gobierno actual del Presidente Maduro como por el nuevo Gobierno elegido después de las elecciones, si éstas fuesen aprobadas en el referéndum consultivo.
Los firmantes de la presente carta expresamos al mundo nuestro rechazo al golpe de estado que está teniendo lugar bajo la guía del Gobierno de los Estados Unidos, a cualquier forma de violencia, y a toda intromisión extranjera en los asuntos internos de Venezuela, la cual está siendo apoyada por la corriente mediática seguida por los más poderosos medios de comunicación de los países bajo la égida del Gobierno de USA. De igual manera, solicitamos a las Naciones Unidas emita una resolución para detener los actos de agresión extranjera contra el país mientras se convoca el solicitado referendo consultivo, y se devuelvan los fondos ilegalmente retenidos de manera que se pueda realizar las importaciones de alimentos y medicinas para el pueblo venezolano durante ese tiempo. Así mismo, solicitamos a las Naciones Unidas su decidido apoyo para que se respeten los resultados del solicitado referéndum consultivo.