Desde el 22 de septiembre del corriente año, en la provincia de Misiones, se encuentra detenido el dirigente social Hugo Silva, referente de la organización Tareferos Unidos, que nuclea a trabajadores de la cadena más vulnerable de la producción de yerba mate, los tareferos, o cosechadores manuales de yerba.
A Silva se lo acusa de “instigación al delito”, en el marco de una causa que investiga la ocupación de tierras ociosas por parte de 30 familias en situación de emergencia habitacional. Las organizaciones sociales que en la provincia encabezan una campaña por la liberación de Silva, lo caracterizan como un preso político enmarcado en un episodio de criminalización de la pobreza y de la protesta social.
“La jueza de la causa fabricó una causa contra Silva, acusándolo arbitrariamente de ser partícipe de un delito de usurpación en el que no existe ningún imputado como autor. Se le ha denegado el beneficio de la excarcelación por más que el delito que se le imputa sea excarcelable y no represente peligro procesal alguno” explican desde la Asociación Trabajadores del Estado (ATE Misiones).
“Decimos que Silva es un preso político porque lo que realmente se busca con su detención es disciplinar los reclamos por tierra y vivienda digna, y los constantes acampes de tareferos que luchan contra el hambre y la explotación histórica que sufren en los yerbales de la provincia. Esta es una provincia que produce el 80% de la yerba mate que consume y exporta el país. Pero el placer de tomar mate sigue descansando sobre el trabajo esclavo” añadieron.
Días atrás Silva recibió –en la comisaría de la ciudad de Oberá donde se halla detenido– la visita de su familia y también de una comitiva del Ministerio de Derechos Humanos. En tanto, un grupo de compañeros y compañeras de su organización y su barrio, acampan para exigir la liberación.
