La victoria de Bolsonaro provocó numerosos análisis. Interesante en este caso es la lectura que hace «Le Monde» en su edición online.
«Todo el sur y el oeste del país, parte de Brasil con mayor ingreso per cápita y menor densidad de población, votó a favor del candidato de extrema derecha [las partes azules del mapa]. Cabe destacar, en este sentido, el resultado en los estados occidentales de Rondoina y Mato Grosso, las principales zonas de deforestación del país. Esto es aún más cierto y confirmado en el sureste del país, en los estados de Río de Janeiro, São Paulo, Espírito Santo y Minas Gerais: estos cuatro estados producen cerca del 60% del PIB de Brasil y están poblados principalmente por blancos, que representan el 55% de la población, según el censo de 2010, un poco más que el promedio del 47% de Brasil en su conjunto». Destaca el diario francés.
«El noreste del país, la zona con menor PIB per cápita y densidad de población media, fue la que más votó a favor del candidato del Partido de los Trabajadores, Fernando Haddadad [las partes rojas del mapa]. Esta región también tiene la particularidad de estar habitada por el menor número de descendientes de colonos europeos y tiene el mayor porcentaje de descendientes de esclavos africanos».