“Ciudad de Buenos Aires, Martes 31 de julio de 2018
Se cumple en informar (…) que se ha fijado fecha para la realización de una reunión en territorio con las autoridades de las 18 comunidades (…) que han hecho llegar sus demandas a este Instituto.”
Logrado ese compromiso del INAI, los representantes de las comunidades wichí y guaraní de Salta aceptaron levantar hoy su carpa frente al Congreso.
El documento firmado ayer en el Instituto agrega:
“El encuentro tendrá lugar el día jueves 16 de agosto en Tartagal. Participarán de la misma representantes del INAI así como del Ministerio de Asuntos Indígenas y Desarrollo Social de la provincia. En dicha ocasión, se abordarán las temáticas planteadas por las comunidades”.
La reunión comprometida parece un avance importante, necesario para que el organismo tome contacto directo con la situación que sufren las comunidades salteñas y que según parece “no conocían hasta ahora”.
“Es un paso nomás –evalúan en el acampe–, pero es importante para ver cómo van a resolver los problemas que tenemos, esta vez con todos los referentes que no pudieron estar acá. Va a ser bueno que los hermanos reciban explicaciones y vean de cerca qué nos dicen y qué hacen después los organismos”.
A pesar de las condiciones difíciles que tuvieron que pasar, de la lluvia y el frío, de la permanente tensión por el posible desalojo, hoy están satisfechos.
“Nos vamos fortalecidos y agradecidos, porque recibimos mucha solidaridad. Estamos más firmes que antes para seguir los reclamos, porque está claro que esto no se termina acá, porque si no nos cumplen empezamos de nuevo y ya no vamos a ser cuatro o cinco. Si es necesario, vamos a hacer crecer los acampes en proporción a las demandas.”
Los indígenas manifestaron su solidaridad con la familia de Santiago Maldonado, anunciaron que van a acompañar a los trabajadores de Telam el próximo viernes, e invitaron a todos los que los han venido acompañando, a despedirse el próximo domingo en el lugar del acampe, a partir del mediodía, “para compartir algo de música, lo que cada uno acerque para comer, y un abrazo”.
“Va a ser bueno encontrarnos y seguir atentos –concluyeron–, “porque la lucha no se termina acá. Por ahora, se traslada a Tartagal”.
El documento: