El buque Aquarius, que opera en cooperación con SOS MEDITERRANEE y Médicos sin Fronteras (MSF), ha recibido la autorización formal de las autoridades maltesas para entrar en el puerto de La Valetta. MSF se siente aliviada de recibir refugio para desembarcar a las 141 personas vulnerables rescatadas en el Mediterráneo. Y nos complace que Alemania, Francia, Luxemburgo, Portugal y España hayan decidido compartir la responsabilidad en una respuesta coordinada a nivel europeo.
Desde el rescate del viernes 10 de agosto, nuestra prioridad ha sido garantizar el bienestar de las personas rescatadas en el mar y desembarcarlas lo antes posible en un refugio seguro, de conformidad con el derecho internacional y el derecho marítimo, de modo que el buque pueda seguir prestando la asistencia humanitaria necesaria y urgente a las personas que aún se encuentran en peligro en el Mediterráneo central. Dado que Malta es uno de los puertos seguros más cercanos, el desembarco en La Valetta impide que las personas rescatadas permanezcan varadas en el buque durante períodos más prolongados.
Todavía se necesitan desesperadamente soluciones sostenibles a largo plazo para hacer frente a la crisis humanitaria en el Mediterráneo central. Es responsabilidad de toda la Unión Europea y esperamos ver ejemplos más concretos de liderazgo y solidaridad europeos en el futuro. Al mismo tiempo, seguimos muy preocupados por la situación actual en el Mediterráneo y el futuro de la acción humanitaria en el mar.