Esta semana se llevó a cabo una conferencia preparatoria en las Cámaras de la Ciudad de Edimburgo en la que diplomáticos, expertos, académicos y representantes de la sociedad civil con conocimiento de la región del Medio Oriente consideraron los elementos que se necesitarían para comenzar a trabajar para lograr un acuerdo entre los países de Medio Oriente para prohibir todas las armas de destrucción masiva. Esto es crucial para eliminar el riesgo de uso y amenaza de armas nucleares, químicas y biológicas de una manera que involucre a todos los estados regionales.
El vicealcalde de Edimburgo, Joyce Griffiths, inauguró la conferencia el martes por la mañana diciendo: «La Ilustración escocesa se inició bajo estas cámaras donde los pensadores clave de la época se reunieron para debatir y cuestionar ideas en todos los campos del conocimiento: exigiendo pruebas para fundamentar y racionalizar todas las teorías, para promover el conocimiento y garantizar el beneficio para el individuo y la sociedad como un todo. ¿Es quizás el momento de volver a una revisión drástica de las normas aceptadas y reconsiderar nuestra comprensión del mundo?
El martes por la noche Bill Kidd, miembro del Parlamento Escocés, invitó a los participantes a conocer a los parlamentarios escoceses. Explicó que: «Escocia es un lugar muy adecuado para una reunión preparatoria, una de varias mesas redondas que tendrán lugar en diferentes países fuera de la región. Nuestro Parlamento y Gobierno están interesados en la paz y la seguridad internacional, a pesar de que no pueden tener políticas ni ninguna agenda política sobre las doctrinas de seguridad en el Medio Oriente».
Sharon Dolev del Movimiento de Desarme Israelí dijo: «Durante muchos años hemos escuchado de los estados sobre la imposibilidad y los obstáculos, así como las razones por las que no podemos alcanzar una zona libre de armas de destrucción masiva en nuestra vida. Sin embargo, dado que la presencia de armas de destrucción masiva en esta zona explosiva puede acortar nuestras vidas, hemos decidido como sociedad civil explorar las posibilidades y creemos que una zona libre de estas armas no es solo necesaria, sino factible una vez que nuestros gobiernos decidan actuar».
Paul Ingram, del Consejo de Información de Seguridad Británico Americano, añadió: «Durante mucho tiempo, los estados han visto las armas de destrucción masiva como una opción para la seguridad o para alcanzar objetivos políticos. La política y el conflicto no se pueden eliminar de la región, pero los estados tienen la responsabilidad de cooperar de manera más efectiva para generar confianza y eliminar las ADM de la ecuación.
Tony Robinson, de Mundo sin Guerras y Violencia dijo: «La falta de progreso en una Zona Libre de ADM ha sido una gran decepción y también perjudicial para el régimen de no proliferación más amplio. Un grupo cada vez más numeroso de personas está desafiando este pesimismo y está involucrado en este proceso para redactar un tratado modelo que muestra el camino a seguir».
Traducido del inglés por Valeria Paredes