No hay democracia si no tenemos derecho a decidir. ¡Democracia Real Ya!

No es muy diferente lo que pasa en Cataluña a lo que sufrimos en todos los territorios del Estado español aunque hoy todo el interés esté en Cataluña por la represión de la que está siendo objeto para impedir que pueda ejercer su derecho al voto en el referéndum, mientras los ciudadanos han decidido defenderlo y ejercerlo. Tal vez, estemos ante el caso de que a iguales problemas podamos dar soluciones comunes.

Las posiciones que mantienen desde el gobierno español y el gobierno catalán, cuyos líderes forman parte de partidos que se están ahogando en la corrupción, no son muy diferentes aunque la responsabilidad mayor la tiene Mariano Rajoy, cuyas malas artes al gobernar han permitido que se muestren en su esplendor sus ideas y modos de hacer franquistas como podemos ver a través de las imágenes ahora mismo.

Hay muchos elementos e intereses detrás de todo lo que se está moviendo pero hay algo que ha unido y que ha hecho que mucha gente haya salido a la calle, se haya manifestado y vaya a votar: es el derecho a decidir y el rechazo a Mariano Rajoy y su partido.

Hay que aclarar que en todo el estado español se han multiplicado las muestras de apoyo al derecho de los catalanes a decidir sobre su futuro y de rechazo a Rajoy. El cartel que abre esta nota es uno de los muchos que están invitando a manifestarse en distintas ciudades españolas.

Desde nuestro punto de vista, la solución al “conflicto hispano-catalán” puede ser la misma que necesitan el resto de los españoles y no es otra que generar un ámbito de acercamiento y diálogo en el que se plantee como objetivo conversar en qué términos declarar un proceso constituyente,  en el que toda la población del estado español decida dentro de qué marco jurídico quiere construir su futuro.

Más allá de lo que ocurra hoy y en el futuro más cercano en Cataluña respecto a su posible independencia, el problema de fondo es el mismo para todos. Es claro que la Constitución del 78, hija de la dictadura de Franco, no da más y lo que estamos viviendo básicamente es eso.

Necesitamos un nuevo proceso constituyente en el que podamos decidir, por ejemplo, sobre:

  • Si se quiere como forma de estado una monarquía o una república. O lo que es igual si se quiere tener como jefe de estado a una persona elegida por todos los ciudadanos o a alguien que es hijo, nieto de… y que, además, en el caso de la Casa Real española hace negocios y los facilita entre vendedores de armas y gobernantes asesinos. En definitiva, si se quiere seguir viviendo en un modelo que viene del Medioevo aliado con corruptos y asesinos o pasamos páginas y nos ubicamos en el presente, viviendo cuando menos en una república (por cierto, no es la máxima aspiración de quien escribe)
  • Si se quiere o no un estado confederal y qué competencias tendría cada estado/nacionalidad o como se reconozca cada pueblo.
  • El cuestionamiento de las fronteras en un plazo medio.
  • Si se quiere seguir manteniendo el artículo 135 de la Constitución Española o que vuelva a escribirse como fue en sus orígenes. El citado artículo fue modificado en 48 horas por el socialista José Luis Zapatero y contó con el respaldo del Partido Popular, lo que hicieron a espaldas de la ciudadanía. Este artículo prioriza que el estado español devuelva la deuda externa (buena parte de la cual es privada) al bienestar social de la población, es decir, a costa de reducir presupuestos públicos de campos como sanidad, educación, pensiones, etc. si es necesario… y lo ha sido, sólo hay que ver los recortes sufridos. La seguridad de que la vida y la libertad de las personas se ponen por encima de cualquier otro valor o interés o no.
  • La renuncia o no del estado español a la guerra como modo de resolución de conflictos con otros países.
  • Y, como consecuencia, la participación o no en operaciones de la OTAN, y la salida o no de la OTAN.
  • La renuncia o no de España a la defensa y justificación de las armas nucleares.
  • La posibilidad de que todo representante público deje su cargo de inmediato si es que no responde al programa por el cual fue elegido.
  • La revisión de la condición de aforamiento de los cargos públicos. Es decir, que puedan ser juzgados en el caso de que haya indicios serios de que han cometido delitos, especialmente aquellos que tienen relación con el mal manejo de los intereses públicos.
  • La incentivación de los referéndums sobre todos los temas importantes que afecten a la población.
  • La potenciación o no de lo público (sanidad, educación, pensiones…)
  • La potenciación o no de una economía mixta.
  • La puesta en marcha o no de una renta básica universal.
  • Y todos los temas que en los que necesitemos ponernos de acuerdo y que afecten al conjunto de la población.

En síntesis, necesitamos poner en tela de juicio la monarquía, el funcionamiento de los partidos tradicionales, la falta de transparencia… y todo el sistema que acompaña a lo anterior de corruptelas, amiguismos, entrega en bandeja del bienestar de la ciudadanía a las multinacionales, la participación en guerras que solo dejan desolación y refugiados a los cuales les dejamos la entrada, etc.

Hemos de exigir el derecho a poder construir el futuro al que aspiramos entre todos.

¡Proceso Constituyente YA en el que se ponga como centro y valor fundamental a las personas y las leyes a su servicio!