La última vez que hablamos con alguien de Paraguay habían atacado el Congreso, lo habían prendido fuego y había gente herida de bala. Pasaron algunos meses, hubo cambios en el Senado, por ejemplo, el nuevo presidente del Senado es Fernando Lugo, quien fuera retirado del poder a través de un golpe de estado encabezado por algunos de sus actuales colegas.
Pero vamos a Paraguay porque hay una masiva movilización de campesinos desde hace cuatro semanas, que han logrado que el Senado le dé media sanción a una ley que subsidia parte de las deudas que les impiden vivir de su trabajo.
Luis Rojas Villagra, es economista paraguayo, un gran estudioso del agronegocio y del funcionamiento del capitalismo en Paraguay. Nos va a ayudar, sin dudas, a entender todo lo que ocurre en su país.
¿Porque no es viable el trabajo de la tierra en Paraguay?
Ahora mismo hay una manifestación importante de población campesina, en la ciudad capital en Asunción, desde hace tres semanas, más o menos, por los problemas económicos, fundamentalmente por los que están atravesando estas familias de pequeños productores, que están en una situación económica muy difícil, con problemas de producción, de venta, de comercialización y al mismo tiempo de alto endeudamiento, de haber tomado créditos. Y hoy están en una situación de no poder devolver esos créditos, no poder pagar, lo cual implica riesgos para su permanencia en el campo, el riesgo de perder la tierra, la propiedad, de perder maquinarias, de perder herramientas de trabajo por la cuestión del endeudamiento. Entonces, esta manifestación, es una manifestación un poco de desesperación de los pequeños productores que ven amenazado su permanencia en el campo, en esta situación económica compleja.
Están pidiendo una medida de urgencia que sería el subsidio a los pequeños productores que están con problemas de endeudamiento, un subsidio desde el Estado para poder salir de esa situación complicada, difícil, en la cual están actualmente. Y posteriormente, de regularizar un poco la situación de las deudas que tienen, poder implementar o con apoyo también del gobierno, del ministerio de Agricultura, un programa de producción más acorde a la situación actual y que les permita a ellos generar ingresos y diversificar la producción, mejorar la comercialización, avanzar en la industrialización de la producción agrícola. De tal modo que los ingresos que generen puedan permitirles mejorar su calidad de vida y poder cumplir con sus compromisos financieros.
Hoy en día es una situación medio de impasse, ahí están pidiendo una medida más bien de urgencia, un alivio financiero, un respiro para poder salir de esa situación complicada
Sí, de hecho, declaran la emergencia para todo lo que tiene que ver con la agricultura familiar, con estos pequeños mini fundistas, lo que pasa es que el lobby de las grandes exportadoras de granos está presente de manera arrasadora, tanto en el Congreso, como en el Senado. ¿Como afecta esto al país?
Le afecta mucho, no solamente hoy, sino estas empresas, estos negocios, las empresas agro- exportadoras, los sojeros, los ganaderos, el sector económicamente más fuerte en el campo, ha impulsado un proyecto desde hace décadas, podemos hablar hace 3 o 4 décadas de expansión de un modelo capitalista muy fuerte en el campo Paraguayo, con la mecanización masiva a la agricultura, la expansión de monocultivos transgénicos, la expansión de la ganadería para exportación de carne y todo lo cual ha conllevado a una función campesina, a una función de población indígena que se ha visto excluida de este modelo productivo que requiere mucho capital, mucha inversión, mucho dinero para poder ser competitivo en esa forma productiva.
Los ha arrinconado en materia territorial y también se ha complementado esto negativamente con políticas desde el sector público, desde el propio gobierno, que han favorecido a esta expansión del modelo de monocultivos, de los rubros más rentables, dejando de lado la agricultura familiar, la agricultura minifundiaria, de pequeños productores que tienen otras lógicas, otras dinámicas, que requieren otro tipo de apoyo, apoyo técnico, apoyo de crediticio diferenciado y ahí es donde el gobierno no ha tenido políticas para este sector. Y ese combo de malas políticas agrarias y de una expansión muy fuerte a partir de la inversión del capital en el sector de agronegocios, ha derivado en un empobrecimiento, una marginación de estos pequeños productores, que van quedando en territorios cada vez más reducidos del país, con menos accesos a la tierra, con fincas cada vez más pequeñas, con menos posibilidad de ser una unidad productiva autosostenible… En esta coyuntura es donde nos encontramos, con poca respuesta desde el sector público para atender las demandas de este sector que lleva más de 3 semanas aquí en la capital y parece que esto va a seguir porque no se resuelve esta situación.
Luis, para terminar de describir este escenario en el cual se están dando estas marchas, estas manifestaciones me parece que uno de los grandes problemas que ha surgido en Paraguay por esto que hablaba de las grandes inversiones que eran necesarias y demás, es una fuerte extranjerización de la tierra. ¿Qué medidas se están tomando, si es que se está tomando alguna para frenar este ultraje?
Es un fenómeno histórico y actual lo de la extranjerización de la tierra, ya es un fenómeno centenario o que se ha iniciado hace más de 100 años con la venta de grandes extensiones de tierra a capitales extranjeros. Paraguay es un país caracterizado por los latifundios, es decir por grandes extensiones de tierra, en manos de pocos propietarios, principalmente, extranjeros. Esta situación no ha cambiado mucho en los últimos años, la concentración de la tierra se ha mantenido, incluso se ha incrementado también en muchas regiones del país y gran parte de esa concentración de la tierra en pocos propietarios, corresponde a propietarios extranjeros, hay mucho capital brasileño en Paraguay, capital uruguayo, capital argentino, también capital europeo y de otros países.
Con la crisis económica del 2008, en todo el mundo, ha habido un flujo financiero importante que se ha dirigido a la agricultura, a la compra de tierras, al fenómeno del acaparamiento de tierras como una inversión más segura que la inversión financiera, entonces aquí también se ha disparado ese fenómeno. Realmente no hay datos muy claros en cuanto al fenómeno de la extranjerización, pero sabemos que más del 30% de la tierra hoy está en manos de empresas extranjeras en Paraguay, con una tendencia a que esto siga aumentando cada vez más y bueno significando lo que decía anteriormente la implementación de un modelo de producción extractivista, de producción en gran escala y la migración, la función de las poblaciones rurales que están es esos territorios.
Luis, me pareció fundamental todo este contexto porque muchas veces cuando se escucha que algún sector le pide a un gobierno que le perdone o que le subsidie una deuda, se suele señalar con el dedo a ese sector por ineficiente, o que se debe hacer cargo de su situación, pero me parece que aquí estamos hablando de una matriz económica de un país, desde hace décadas, que ha llevado a que las pequeñas organizaciones de campesinos estén en esta situación tan dramática que están viviendo hoy
Lastimosamente se da una polarización muy fuerte en relación a un tema como este, entre sectores ciudadanos, incluso. Mucha gente está en contra de una ayuda al sector campesino, un subsidio, porque es como una lectura muy simple, “cada uno tiene que hacerse cargo de sus deudas”, “de sus compromisos”, “no se puede subsidiar a nadie”. Hay una lectura que simplifica mucho el problema de fondo, que no aclara realmente que está funcionando por debajo de este modelo productivo, las políticas públicas y hay una condena muy urbana hacia el mundo rural, hacia el productor rural. En ese sentido ineficiente, incapacidad de auto sostenerse y se desconoce un montón de situaciones, el problema de la tierra, el problema de la presión que ejerce otros actores públicos sobre los pequeños productores, la ineficiencia de las políticas públicas. La complicidad de las políticas públicas en las situaciones en que llegan los productores, por ejemplo, aquí es muy común que el ministerio de Agricultura fomente algún rubro de renta, algún rubro como el sésamo, como la producción de chía, como algún producto y finalmente los precios de venta de esos productos con muy por debajo de lo que se había prometido en momento. Pasa mucho esto, que se promete un precio y a la hora de la comercialización finalmente es la mitad de lo que se había comprometido. Eso lleva a la situación de descomposición de la pequeña agricultura por vincularse al mercado en condiciones muy desventajosas, sin un apoyo real del sector público. Termina polarizándose la situación y ajustándose a sectores diversos, y bueno hay un escenario de crispación, de desentendimiento, de confrontación que no ayudan a encontrar soluciones que permitan ir saliendo deesta situación muy desfavorable para los pequeños productores .
Luis Rojas Villagra es miembro fundador de la Sociedad de Economía Política de Paraguay, miembro de la Sociedad Latinoamericana de Economía Política y coordinador del grupo de trabajo: Crisis de la Economía Mundial Capitalista del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).