Cada 30 de agosto, familias y organizaciones sociales, políticas y de Derechos Humanos, conmemoran el Día Internacional del Detenido Desaparecido.
La práctica de la desaparición forzosa es probablemente una de las acciones más infames de las practicadas por las dictaduras latinoamericanas. Aprendizaje funesto y tutelado en la Escuela de las Américas, recinto de estudios superiores en criminalidad de Estado a la que se iba becada una parte importante de la alta oficialidad de las FFAA.
Hoy, la exigencia sigue siendo esperanza y las razones que tuvieron para desaparecerlos siguen siendo fudamento que inspira nuevas luchas, es que hay cuestiones tan básicas y conmovedoras como el pan para todos, como consultorios con médicos y medicamentos, como escuelas y universidades con hijos de trabajadores aprendiendo. Hay un mundo pendiente por construir y soñar que sigue siendo el mismo mundo que los dueños del miedo decidieron combatir repartiendo a los nuestros por una geografía de la impunidad que aún hoy nos impide encontrarlos.
Acá, desde Chile, preguntamos por Hugo Arispe, por José Huenante, por José Vergara. Y preguntamos por los 43 estudiantes de Ayotzinapa y preguntamos también por Santiago Maldonado.
Frente Amplio Chile