Otra mirada es fruto de un trabajo de más de dos años en contacto con personas en situación de pluridiscapacidad en un hogar de atención especializado de la región parisina.
Mi objetivo inicial no era “tomar fotos”, sino co-construir imágenes fuertes que permitieran sensibilizar al gran público con las problemáticas de las personas discapacitadas. Para ello, me tomé el tiempo necesario con cada individuo a fin de crear un vínculo de confianza y definir con cada uno un lenguaje común, casi siempre no verbal, que se manifiesta en retratos positivos donde la discapacidad es apenas perceptible.
Decidimos abstraernos de las diferencias físicas para invitar al lector a abrirse a Otra Mirada, más profunda y humana.
Dedico este trabajo a Evelyne, que partió prematuramente y agradezco de todo corazón al personal del Hogar (MAS) André Berge, a los residentes, los cuidadores, las familias y todas las demás personas que directa o indirectamente, participaron en este proyecto.
“Ya no puedo hablar, abro la boca pero no sale nada. Tantas cosas para decir. Me pregunto si realmente lo quieren escuchar. En cambio, dejo que mi mente pesada explote con pensamientos inacabados”. Tina J. Richardson