Venezuela suspende el porte de armas en todo el país por un período de seis meses con el objetivo de garantizar la seguridad en el país sudamericano.
“Se suspende el porte de armas de fuego en todo el territorio nacional por 180 días, para garantizar la seguridad, la paz y el orden interno”, ha anunciado este martes el ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Néstor Reverol, en su cuenta de la red social Twitter.
Esta medida ha sido tomada mientras el país vive días de gran tensión y subversión por las manifestaciones callejeras tanto a favor como en contra del Gobierno del presidente Nicolás Maduro, quien convocó el lunes una Asamblea Nacional Constituyente para elaborar una nueva Carta Magna con el fin de, según dijo, lograr la paz en el país y vencer el “golpe de Estado” en su contra.
Se suspende el porte de armas de fuego en todo el territorio nacional por 180 días, para garantizar la seguridad, la paz y el orden interno”, anuncia el ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Néstor Reverol.
La decisión del mandatario, sin embargo, no fue bien acogida por la opositora Mesa de la Unidad (MUD), que convocó más protestas y pidió al “pueblo” que “se rebelen” ante el anuncio de Maduro, que tacha de “fraudulento”.
El presidente de la Asamblea Nacional (AN), Julio Borges, criticó que la conformación de una Asamblea Constituyente “atenta contra la democracia del país”.
Al respecto, el ministro venezolano de Defensa, Vladimir Padrino López, señaló que se trata de “una propuesta revolucionaria, constitucional, profundamente democrática que nosotros acompañamos desde la Fuerza Armada Nacional Bolivariana”.
En un vídeo difundido en la cuenta de Twitter del ministro del Poder Popular para la Comunicación e Información, Ernesto Villegas, Padrino López sostuvo que la medida de Maduro permite la reanudación de un diálogo nacional entre el Gobierno y los opositores.
Asimismo, insistió en que la propuesta constitucional brinda la oportunidad para que todo el país se mantenga unido con el propósito de potenciar y reforzar la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
El 30 de octubre de 2016, el Gobierno y la oposición iniciaron un proceso de diálogo para resolver las tensiones en Venezuela con la mediación del Vaticano y de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur). El 6 de enero de 2017, la MUD congeló las conversaciones en medio de las acusaciones de ambas partes de no haber cumplido con lo pactado.
Esto se produjo mientras que el presidente de Venezuela ha hecho llamados incesantes a la derecha para que vuelva a la mesa de conversaciones, pero esta se ha negado y ahora está enfocada en realizar protestas violentas, muchas con saldos de muertos y heridos.