Por RBA, Rede Brasil Atual | Traducción de Pressenza
No es sólo la paralización de transportes lo que hace evidente la adhesión. El tránsito está muy por debajo de lo normal. Fábricas y escuelas amanecen cerradas. El país da un mensaje sin precedentes al gobierno sin voto.
Capitales y principales ciudades del país amanecieron paralizadas este viernes (28), día de la huelga general convocada por los frentes populares en protesta contra las reformas previsionales y laborales propuestas por el gobierno Temer. En San Pablo, líneas de metro, ómnibus y trenes no circulan, con excepción de la línea 4 del metro que funciona normalmente. Las rutas y avenidas que dan acceso a la ciudad fueron cerradas.
En la Marginal Tieté, los carriles central y rápido fueron bloquedos a la altura de la Terminal Tieté. Las avenidas Francisco Morato, del Estado y Tiradentes (centro) también están bloqueadas. Asimismo, manifestaciones interceptaron las avenidas Vital Brasil, Brigadeiro Faria Lima y Ragueb Chohfi y la ruta del M’ Boi Mirim, todas en la zona sur. En el centro fueron cerradas la avenida Higienópolis y la calle Coronel Xavier de Toledo así como el Viaduto do Chá (todas vías de intensa circulación cotidiana).
Las rutas estatales Anhanguera (en la región de Jundiaí, dirección San Pablo), Dutra (en Guarulhos y San José dos Campos), Régis Bittencourt (en Taboão da Serra y Embú das Artes), Anchieta (en dirección al litoral), Cônego Domênico Rangoni (en el litoral sur), también están bloqueadas.
Cerca de las 8:15 hs, Wagner Fajardo, dirigente del Sindicato de los empleados del metro, en entrevista con la Radio Brasil Atual hizo un balance de las primeras horas de paralización. “Ya podemos considerar que la huelga es un éxito. La adhesión de los trabajadores fue muy grande, todas las líneas están completamente paralizadas. Y la población comprendió la huelga y no está llegando masivamente a las estaciones, de modo que todo está muy tranquilo. Si hubiera algún empleado del Metro, será en carácter de contingencia, cuando la empresa pone personal jerárquico para operar los trenes, lo que pone en riesgo a la población”.
En Mogi das Cruzes, conurbano de la capital, el comercio en el centro de la ciudad está cerrado, mientras entidades sindicales y movimientos sociales mantienen protestas en las calles del centro.
Otras capitales
En Rio, manifestantes cerraron el puente Rio-Niteroi. Belo Horizonte amaneció sin metro.
En Puerto Alegre se hicieron bloqueos en la avenida Baltazar Oliveira Garcia, en la zona norte; en la Avenida Mauá, en el centro; en el Puente de Guaíba, en la ruta BR-290; en la Bento Gonçalves, zona este. Ómnibus y trenes no operan.
En Santa Catarina, Blumenau y Florianópolis amanecieron sin ómnibus. Conductores y cobradores (de pasajes) también hicieron huelga en las ciudades paulistas de São José dos Campos, Jacareí, Bauru, Sorocaba, región del ABC (zona industrial de Gran San Pablo) y Guarulhos. Otro tanto sucede en Salvador, Recife, Fortaleza y Curitiba. En Natal y Campo Grande la paralización del transporte público es parcial. João Pessoa no tiene servicio de ómnibus ni trenes, y tiene cerradas las avenidas bloqueando el acceso a la región metropolitana.
En San Luis todas las terminales de ómnibus fueron ocupadas y no hay circulación de ningún transporte colectivo en la ciudad. La ruta BR 135 fue bloqueada y ocupado el Puerto de Itaquí. Bancos y comercios están paralizados.
Los principales accesos a Curitiba están bloqueados –BR-116 y BR-277– así como la Avenida das Torres que da acceso al aeropuerto Afonso Pena. La capital paranaense tiene paralizados el 100% de los transportes.
Trabajadores de Sergipe cierran el puente de Marcos Freire II, en Socorro, y la avenida Heráclito Rollemberg, en Aracaju.
Portuarios ocupan la Companhia Docas do Para y cierran las rutas de acceso al mercado Ver-o-peso, en el centro de Belém.
Aeropuertos
Más de mil integrantes del Frente Pueblo Sin Miedo cerraron la Ruta Hélio Smidt, que lleva al Aeropuerto de Guarulhos, San Pablo, a comienzos de la mañana. El aeropuerto funciona con atrasos en las operaciones, tal como sucede en Congonhas, al sur de la capital paulista.
Manifestantes también bloquearon los accesos a los principales aeropuertos Santos Dumnot (Rio) y Juscelino Kubitschek (Brasília).