En Colombia, el estudiante Sergio Urrego, de 16 años, se suicidó después de haber sido discriminado por funcionarios de la escuela a causa de su orientación sexual.

En varios países de la región, niñas y adolescentes son las principales víctimas de la violencia sexual en los espacios educativos.

El número de casos es alarmante, pero pocos de ellos son reportados o generan una punición para el delincuente.

La identidad de género y la orientación sexual no pueden ser motivo de discriminación, violencia y opresión en ningún lugar, mucho menos en las escuelas y espacios educativos, debido a que tales acciones violan una serie de derechos humanos.

Creemos que estas expresiones de prejuicio tienen que ser enfrentadas y superadas con urgencia para asegurar espacios de aprendizaje seguros y equitativos.

Te invitamos a participar en 15 días de movilización.

Únete a nosotros en la campaña «Educación con Diversidad e Igualdad»

Para obtener más información, acesse:
http://educacionygenero.campanaderechoeducacion.org/