Autoridades competentes explorarán a fondo cómo esos propietarios adquirieron la licencia de prospección petrolera del bloque OPL 245, un área dividida para la perforación y extracción del crudo.
El consorcio holandés Shell Petroleum Development Company de Nigeria es la mayor petrolera que opera en este país, la cual derrama desde los últimos 50 años más de un millón de toneladas del combustible, con lo que supera en 20 veces la carga del mayor desastre ambiental de España, el Prestige, con 77 mil toneladas.
‘Somos conscientes de los informes de los avisos de los medios de comunicación, pero no hemos recibido ninguna notificación’, dijo un portavoz de la petrolera italiana Eni, mientras, la neerlandesa se negó a hacer comentarios.
La disposición de los tribunales sobre la exploración petrolera durará hasta que la investigación concluya, pero la EFCC ‘no puede establecer un calendario preciso sobre cuándo culminarán’, se expresó en el texto publicado.
Esa inspección de la agencia anticorrupción nigeriana es la última de muchas relacionadas con la compra del bloque OPL 245 para 2011.
Similar adquisición en la actualidad podría albergar más de nueve mil millones de barriles de petróleo, según cifras referidas de la industria de ese sector en Nigeria.
La EFCC presentó los documentos a la corte en Abuja el pasado 11 de enero, pero las otras partes no estuvieron presentes en el juicio.
Se investigará si la compra de la OPL 245 involucró ‘actos de conspiración, soborno, corrupción oficial y lavado de dinero’, según los documentos presentados por la corte.
La licencia para el campo petrolífero fue concedida inicialmente en 1998 por el ex ministro de petróleo nigeriano Dan Etete a la compañía Malabu Oil and Gas, en la que tenía acciones. La misma fue vendida en 2011 a Eni y Shell.
Fiscales italianos concluyeron en diciembre una investigación sobre la Eni y la Shell por supuesta corrupción en torno a la adquisición de la licencia para la exploración del crudo en la región del delta del Níger, dijeron fuentes del sector.