Por Antonio Rebolledo (*)
La CONAF cuenta con 4 avionetas Cessna para el combate de incendios en todo el país.
La compra de la última de estas cuatro avionetas, modelo AirTractor (AT) 802F, adquirida por el gobierno chileno, tuvo un costo de 2,7 millones de dólares, y fue anunciada en su momento con bombos y platillos por el ex ministro Burgos.
El Presupuesto de Defensa aprobado para el año 2017 por el honorable Congreso Nacional, alcanza a 2.589 millones de dólares.
Los fondos reservados por la Ley del Cobre destinan a las fuerzas armadas otros 1.000 millones de dólares, para ser gastados exclusivamente en armamento.
Con estos 3.589 millones de dólares, habríamos podido comprar el año pasado, 1.329 (mil trescientos veinte y nueve) aviones Cessna AirTractor (AT) 802F, con capacidad de 3.000 litros de agua cada uno para combatir incendios.
Aún si no tocáramos los sueldos millonarios de los uniformados chilenos, ni su lujosa atención de salud, ni sus pensiones estratosféricas, sólo con los 1.000 millones del cobre, el año pasado podríamos haber comprado 370 aviones Cessna contra incendios, destinando 25 avionetas para el combate de incendios por cada una de las regiones del país…
144.000 hectáreas de bosques se han quemado en estos días, mientras oficiales y suboficiales del ejército, la armada y la aviación, disfrutan de sus cocteles, tendidos en el pasto, a la orilla de la piscina en sus lujosas mansiones o en algún resort en Miami.
Como siempre, los honorables senadores y diputados siguen aprobando presupuestos millonarios a las fuerzas armadas, mientras el país entero arde en llamas…
Ni hablar del estado de la educación pública, la salud, o el robo en despoblado de nuestros ahorros previsionales a manos de los dueños y gerentes de las AFP, la colusión de las grandes empresas, etc., etc., etc.
Ojalá la indignación nacional encuentre pronto los cauces de expresión que terminen con tanta inequidad.
Frente Amplio, en ti confiamos…
(*) Ingeniero Comercial USACH