Texto y fotografía: César Morejón Castillo
A ocho meses y días del terremoto de Manabí y después de cinco meses después de la última vez que visité la zona de Jama, Don Juan, La Chorrera y Pedernales. La situación no ha cambiado. Fuera de los albergues oficiales, miles de familias siguen viviendo en carpas armadas con lonas publicitarias, plástico o carpas donadas por gobiernos extranjeros.
A pesar de muchas iniciativas ciudadanas de reconstrucción y colectivos que nacieron a raíz de la tragedia de Manabí y Esmeraldas, sigue haciendo falta mucho trabajo, manos y financiamiento para reconstruir la vida de cientos de personas que hoy viven en condiciones inhumanas.
Considero que es clave canalizar donaciones al Proyecto Caemba (info@casitasdebambu.com). Ellos construyen casas permanentes de bambú, resistentes a sismos y de bajo costo, en pocos días . Son la iniciativa independiente que más ha construido en la zona afectada.