Aunque no hubo consenso entre los voceros del No en el plebiscito y los delegados del Gobierno en torno al nuevo acuerdo de paz con las Farc, la decisión del presidente Juan Manuel Santos es seguir adelante y echar a andar de una vez por todas el que es su principal proyecto político. Por eso definió que este jueves, en el Teatro Colón de Bogotá, a las 11:00 de la mañana, junto al máximo comandante de esa guerrilla, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, se llevará a cabo el acto protocolario de firma del nuevo texto de fin del conflicto, que incluye algunas de las propuestas presentadas por la oposición pero, al mismo tiempo, mantiene otros aspectos que siguen siendo motivo de discordia.
La pregunta es: ¿cómo se va a refrendar el nuevo pacto de paz? Aunque se habla de diferentes opciones, está claro que para el Gobierno sólo hay un escenario: el Congreso de la República. Al cierre de esta edición, en una reunión privada, los negociadores del Gobierno y las Farc definían ese mecanismo refrendatorio, y dos eran las fórmulas que se debatían: tramitar un proyecto de ley aprobatorio del acuerdo final o integrarlo al ordenamiento jurídico vía proposición legislativa. Ahora, todo indica que la refrendación vía Congreso se realizaría el próximo martes, en una discusión que con seguridad contará con la enconada oposición del uribista Centro Democrático.
De hecho, en la tarde de ayer, en la presidencia del Senado, se llevó a cabo una reunión entre el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y los voceros de los partidos de la llamada Coalición por la Paz, para hablar de esa refrendación. “Siempre dije que los del No, los del Centro Democrático, no iban a concertar nada así se hiciera lo que ellos dijeran. Sólo se quieren ir hasta 2018 (…) Hoy ha quedado claro en la reunión del Gobierno con los partidos que con la firma del nuevo acuerdo, en seis meses las Farc estarán desarmadas”, expresó el codirector del Partido de la U, senador Armando Benedetti.
Queda entonces cancelado el “cónclave por la paz” que había planteado el presidente del Senado, Mauricio Lizcano, en el que incluso el expresidente Álvaro Uribe prometió participación en aras de buscar un “pacto nacional por la paz”. Hoy, a las 9:00 de la mañana, el equipo negociador del Gobierno se reunirá con los mismos delegados de los partidos que apoyan la paz para comenzar a definir los primeros proyectos que se tramitarán pensando en la implementación de los acuerdos. De entrada, se sabe que la ley de amnistía es prioridad.
En la noche se esperaba una alocución del presidente Santos con todos estos anuncios. Eso sí, en esa perspectiva, el Centro Democrático se niega a tragarse ese “sapo”. El mismo Uribe ha reconocido que es minoría en el Congreso. Por eso, la idea es llevar la batalla política a las calles, insistiendo con su “desobediencia civil”. Como dijo, a título personal, la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático, no se puede permitir que el Gobierno busque aprobar todo por la fuerza: “Si quieren jugar rudo, hay herramientas para jugar rudo”, dijo, planteando la posibilidad de recoger firmas, por ejemplo, para convocar a un referendo como vía para revocar el Congreso o, incluso, habilitar la reelección de Uribe. Como quien dice, Colombia está hoy más polarizada que nunca.
Comunicado Conjunto del gobierno colombiano y las Farc
Bogotá, Colombia, 22 de noviembre de 2016
Las delegaciones del Gobierno Nacional y las FARC-EP hemos acordado firmar el Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera del 12 de noviembre, el próximo jueves 24 de noviembre a las 11:00 a.m. en el Teatro Colón de Bogotá.
De igual forma, las delegaciones acordamos que el mecanismo de refrendación de este Acuerdo será a través del Congreso de la República y estamos precisando los procedimientos que se van utilizar para este propósito.
La consolidación de la paz requiere que avancemos con paso firme hacia la implementación de los acuerdos que permitan superar tantos años de conflicto en Colombia.