Un análisis post elecciones municipales sobre los logros y expectativas para una fuerza política de izquierda que desafía al duopolio político.
Todos los análisis oficialistas se han centrado en los niveles de abstención o en los triunfos y derrotas de los representantes del duopolio. Pero, en lo relacionado a los partidos y movimientos extraduopolio, solo se han limitado a analizar el espectacular triunfo de Jorge Sharp en Valparaíso pues, dada su trascendencia, se les hace imposible ignorarlo.
Pero lo que los analistas oficialistas obvian es que el triunfo de Sharp no es aislado ni tampoco una rara singularidad. En Macul, por ejemplo, el ingeniero de 37 años Gonzalo Montoya logró un impensado 48%, derrotando al otrora invencible democratacristiano Sergio Puyol, quien en sus 24 años de alcalde se había transformado en un pequeño e insoportable reyezuelo que administraba la comuna como si fuera de su propiedad. Montoya se presentó como candidato independiente apoyado por todos los sectores extraduopolio, logrando capturar un significativo caudal de votación provenientes de aquellos votantes de la nueva mayoría que estaban asqueados y cansados de las prácticas mafiosas de Puyol.
Por otro lado, en Arica – comuna que años atrás tuvo a prácticamente todo el Concejo Municipal procesado por la justicia – triunfó el periodista de 37 años, Gerardo Espíndola, militante del Partido Liberal, que encabezaba la lista conformada con el Partido Humanista pero que además recibió el apoyo explícito del Movimiento Autonomista (MA) del Diputado Gabriel Boric y también de la Izquierda Libertaria.
Acompañando estos tres importantes triunfos, están los significativos resultados obtenidos por Scheila Recabarren (PH) que en Juan Fernández alcanzó el 48% y estuvo a solo 12 votos de lograr la Alcaldía; En Taltal, Osvaldo Chávez (RD) supera el 33% de los votos, por su parte, Fidel Valenzuela (PH) y Andrés Dibán logran un 19%, en Alhué y San Miguel respectivamente. Por otro lado, Rossiel González de la Izquierda Autónoma obtiene un 18,1% en Corral mientras que Felipe Valdebenito (MA) alcanza el 12,5% en Temuco. A su vez, Ricardo Díaz (RD) en Antofagasta logra el 11,6% y el abogado independiente Fernando Leal, un 10,8% en Talca. Votaciones menores a los dos dígitos pero igual de significativas obtienen el joven Dr. Pedro Neira en Coronel y Juan Polizzi en Concepción, con un 9,5% cada uno y, finalmente, la dirigente poblacional Doris González alcanza el 8,5% en Estación Central.
Lo interesante de todos estos resultados es que -aunque estos candidatos integraban distintas listas- fueron respaldadas por todos los sectores extraduopolio conforme a los acuerdos preliminares alcanzados para una eventual conformación de un Frente Amplio, inmediatamente después de terminadas las municipales.
Entonces, siendo realmente épico y espectacular el triunfo de Jorge Sharp en Valparaíso, al verlo enlazado y relacionado con los triunfos en Arica y Macul, además de los significativos resultados de las comunas ya mencionadas, resulta una muestra significativa y no excepcional, que bien podría marcar una tendencia.
Así, mientras la Nueva Mayoría insiste con sus mismas prácticas de siempre y se hunde en el fango de su soberbia, los resultados obtenidos por esta nueva camada de jóvenes candidatos muestra que cuando los partidos y movimientos que no están vinculados a la corrupción logran articularse y presentan candidatos preparados al calor de las luchas sociales, los resultados son muy significativos y bien podrían anticipar la llegada del nuevo ciclo político que tanta falta le hace a nuestro país.
Entonces el destacadísimo triunfo de Jorge Sharp en ningún caso corresponde a un hecho excepcional ni menos es una golondrina incapaz de hacer verano, más bien corresponde a esa intensa pero refrescante brisa de septiembre que anuncia el fin del invierno y la pronta llegada de la primavera.