Comunicado de Memoria Activa – 10 de Agosto de 2016
AMIA: De un número a un nombre
Augusto Daniel Jesús tenía 20 años el 18 de julio de 1994, cuando junto a su mamá María Lourdes Jesús y a 83 personas, fue asesinado en el atentado terrorista contra la sede de la AMIA.
El maquiavélico armado de la causa AMIA siempre puso el eje sobre el final, desde el día uno inventaron una historia que debía cerrar a como diera lugar, rápido, sin oposiciones ni contratiempos. Las pruebas no importaban, se inventaban, los testimonios se conseguían, las declaraciones se pagaban, y en medio de esto los muertos no importaban.
Primero eran 86 pero uno se les apareció vivito y coleando de repente, así que de pronto los muertos eran 85.
85 números con 84 nombres, pero tampoco importaba
.
Primero el ex juez Juan José Galeano, los ex fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia, el ex director de la Unidad Antiterrorista Jorge Fino Palacios, y después el fallecido fiscal Alberto Nisman: todos ellos siempre preocupados por hacerles caso a sus “jefes de turno” e intentando convencernos que tenían algo más, eso que iba a ser importante y que iba a destrabar mágicamente la oscura trama.
Jamás en 20 años hicieron ni lo que debían ni lo que podían hacer.
Nos mintieron, nos mintieron siempre, su único trabajo consistió en armar un encubrimiento para que nunca lleguemos a la verdad.
Es probable que les hayan prometido negocios, alfombras rojas, puestos importantes, viajes; y a cambio de esto muchos de ellos hoy están en el banquillo de los acusados en un juicio oral, y el ex fiscal Nisman también estaría imputado.Durante años le pedimos a Nisman que haga los estudios de ADN y se negaba sistemáticamente argumentando que eso podría enojar o entristecer a los familiares de las víctimas.
Los dirigentes de la DAIA nos dicen que “ya se sabe todo” que curioso y ofensivo, lo único que realmente sabemos es el uso y manoseo político que todos le dan a la Causa AMIA desde hace 22 años.
A ninguno de ellos nunca les importó la verdad, ni la justicia, ni los muertos, ni los heridos, ni sus familiares.
Todos estas personas que representaron a la justicia nos avergüenzan y deben ser condenados.
Hoy el trabajo de la UFI AMIA a cargo de los Doctores Namer, Salum y Fillipini le devolvieron su nombre a Augusto.
Hoy las querellas de familiares que no permitimos que la causa AMIA se cierre con mentiras y pactos espurios de alguna manera le devolvemos a Augusto su nombre.
Los muertos de la AMIA si importan, los muertos de la AMIA sí nos importan.
Hoy todos los muertos tienen nombre.
Por Augusto decimos: PRESENTE.
Justicia, Justicia perseguiremos…..
Adriana Reisfeld – Presidente
Diana Malamud – Secretaria General