El pacto sobre el fin del conflicto con las insurgentes FARC-EP aumentó el optimismo de los colombianos acerca del proceso de paz en comparación con etapas previas, reveló la encuesta bimestral Gallup, con ecos hoy en noticiarios del país.
Según la pesquisa realizada entre el 21 de junio y el 2 de julio, el 60 por ciento de los consultados cree que Gobierno y guerrilla podrían finalizar las conversaciones en Cuba este año con la firma de la paz.
Tal resultado representa un incremento notable de la confianza en esas gestiones pues en la anterior indagación sólo el 28 se mostró esperanzado con esa posibilidad.
Voceros del Ejecutivo y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) suscribieron un consenso en La Habana a finales de junio el cual incluye los términos y hoja de ruta para el cese el fuego bilateral y la dejación de armas o desarme de esos guerrilleros, así como las condiciones de su verificación con apoyo de Naciones Unidas.
El 50 por ciento de los entrevistados afirmó que las pláticas entre ambas partes van por buen camino, anteriormente la aprobación llegó apenas al 27.
A tales estadísticas se suma el hecho de que el 69 por ciento de los participantes en la encuesta abogara por insistir en los diálogos hasta lograr una solución política a la confrontación bélica, 17 puntos por encima del registro de mayo, realizado asimismo por Gallup Colombia.
Adicionalmente la indagación reflejó que los ciudadanos le apuestan a las reuniones con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), en busca de una paz completa.
Siete de cada 10 personas, dentro de la muestra seleccionada, dijo apoyar el inicio de reuniones oficiales con ese grupo insurgente, menos numeroso que el primero pero igualmente activo desde hace más de 50 años.
La guerra ha dejado unos 300 mil muertos, casi siete millones de desplazados de sus lugares de origen y al menos 45 mil desaparecidos.
Con sede permanente en la capital cubana, las conversaciones entre representantes gubernamentales y de las FARC-EP comenzaron en 2012 y -a juzgar por sus progresos- podrían terminar satisfactoriamente en fecha cercana luego de haber conciliado posiciones, además, en los temas de reforma rural integral, participación política, combate contra el tráfico ilícito de drogas y víctimas.
En tanto los anunciados ciclos de discusiones con el ELN no tienen aún cronograma.