Por: Roger Cama
Estamos en un mundo donde la revolución tecnológica nos acerca enormemente todo. Podemos estar en un lugar remoto, aislado del capitalismo, de la modernidad, de las modas, de todo; pero basta que tengamos en nuestras manos un Smartphone conectado a la red para acercar ese pequeño lugarcito del mundo y ofrecerlo a otros con una velocidad y una nitidez increíble, o ésta puede acercarnos a otros lugares inimaginablemente desconocidos, es un hecho que rebasa lo perceptual.
Es un mundo en donde se avanza con velocidades enormes, es la sinergia de ideas y esfuerzos de mucha gente que hace posible todo esto. Bien, pero requiere de un ordenamiento para que se armonice; basta un pequeño giro.
En estos momentos está primando aun la verticalidad organizacional corporativa, aún se impone, aún se decide desde arriba; es un esquema obsoleto, pero en otros casos se da un trabajo más suelto, horizontal, sin presiones, desde casa, donde la internet acerca el área de trabajo. Es el caso de Microsoft y otras compañías con estos modelos que ya operan desde un par de décadas.
Nos toca ahora decidir, cuántas horas trabajar, desde dónde. Es tal el desarrollo y la acumulación de datos que podría ser fácil organizarse. Solo basta con crear nuevas tendencias, comunicar con la efectividad debida y hacer que todo vaya hacia la eficiencia y eficacia en tiempo y de esfuerzo físico mínimo, y solo la pasión por el trabajo puede hacer que nuestros ámbitos de trabajo sean los mejores, contando con amigos y colaboradores para tal fin, que es el bienestar de todos.
¿Por qué no crear una nueva forma de trabajo, más holgada, con menos horas de trabajo e igual productividad, que nos dé tiempo para crecer en otros muchos aspectos de la vida, con la libertad de cada quien, aspectos tan importantes y casi fisiológicos, como el espiritual, por ejemplo?
El reto es promover ideas nuevas y que de las sea participe cualquier persona, con total libertad, sin juzgar por su instrucción, solo en base a su creatividad, que es un recurso basto, rico y diverso entre nuestra gente.
El aprender sin límites y de manera rápida es el estilo de vida de muchos ahora, es un recurso excelente y poderoso en nuestras manos.
¿Por qué no dedicar las primeras horas de la mañana al trabajo o al estudio e instrucción técnica y superior, según nuestra edad o etapa, y dedicar la tarde a otras áreas como la investigación, el pasar más tiempo con los hijos o realizar actividades afectivas?
El esquema actual hace que una persona, mientras más exitosa es, menos tiempo tiene, pero obtiene más dinero, en proporción. Es el costo de hacer una carrera corporativa, donde el consumo de tiempo diario es alto, hasta sobrecargado.
En otro caso está el trabajar muchas horas, dobles turnos, debido a la desigualdad de salarios, y que fuerza a hacer tales esfuerzos y hasta sacrificios que se hacen por amor, o tal vez, en el fondo, por miedo, haciéndolo por los hijos o por asegurar el propio futuro. Es un estado de supervivencia momento a momento experimentado por una gran mayoría, no dando pie a alternativas de ningún tipo, ya que se está a merced de intereses netamente corporativos planeados desde una cómoda oficina.
En nuestro mundo se están dando nuevas formas de intercambio de bienes y servicios, donde la moneda, si es que existe, es de manera virtual y de forma simbólica; son recursos que surgen a raíz de las crisis económicas creadas y calculadas por el sistema corporativo.
El retorno de los jóvenes al campo, como en el caso de Italia, que es uno de los tantos casos donde hay un gran porcentaje de desempleo en el mundo, los jóvenes se organizan de manera inteligente y ofrecen sus productos de manera directa, y en muchos casos los compradores lo hacen también organizadamente para comprar en cantidad y dividirla, según la necesidad de cada persona. De esta manera, los jóvenes italianos se están insertando al esquema económico.
En el campo político se da casos de éxito primigenio; tal es el caso del Movimiento 5 Estrellas, fundado por Beppe Grillo y Gianroberto Casaleggio.
Beppe Grillo animó a un gran número de personas de muchas regiones de Italia a participar en este movimiento liderado por la gente, que es el núcleo del movimiento. Éste se define como una libre asociación de ciudadanos.
Cuentan con una plataforma tecnológica de avanzada, en la que se puede participar activamente, ya que a través de esta plataforma se hace más que opinar, también uno puede ser parte de lo que acontece en tiempo real dentro de lo político y dar una respuesta y votar, en tal caso, a favor o en contra de una ley. Es un muy buen intento político.
El Movimiento 5 Estrellas es el modelo ideal en estos momentos; combina la tecnología y la base social en un solo clic, solo basta absorber el know how del 5 Stelle y se estará en posibilidades de cambiar las reglas del juego, donde la participación ciudadana será primordial.
El concepto de calidad y de productos bien elaborados está recobrando interés, ya que lo industrial difícilmente logra tal fin, y debido a que la elaboración artesanal supera enormemente las expectativas. Un queso, un vino, la cerveza, tendrán buena calidad si es que tiene la atención y cuidados que una maquina jamás podrá tener. El ser humano tiene algo intangible que aporta a ese proceso dándole un toque casi divino que apreciará de gran manera aquel que deguste tal alimento. Es esa cualidad creativa, casi mágica, un potencial importante por rescatar y que está en todos.
Hay muchos libros e ideas cubiertos de moho, son obsoletos; en estos tiempos actuales se requiere dar respuestas actuales con ideas actuales. Es una época preciosa en donde hay que tener (o al menos trabajar por tenerla) una madurez e integridad personal para ofrecerla a nuestra gente; es un digno regalo que uno se hace y hace a otros, es lo creciente y verdadero que nos sacará de esta gigantesca vorágine ultra económica imaginaria, que se experimenta como una arraigada realidad psicológica más que como una percepción externa recordada constantemente.
El hecho real es que la riqueza monetaria está en la nube informática: se hacen pagos con dinero no tangible, son números los que se tranzan, pequeños bits que hacen la diferencia, estamos en un sistema de creencias del que difícilmente nos podemos sacudir; además, éste se perfecciona y nos hace la vida fácil de algún modo, pero lo real es que facilita el control económico al que estamos anexados.
Hay una riqueza real, tangible: es el agua, nuestros recursos acuíferos, nuestros paisajes mordidos por la minería legal e ilegal, los bosques roídos por la tala indiscriminada; es tal la magnitud que avergonzaría a una familia de castores, estos lugares son parte de nuestro hogar, que están siendo comprados y apropiados por transnacionales de forma sombría y sigilosa. Lo hacen para vender, especular y negociar sueños de quien pueda pagarlos. Es un sueño impuesto, cumplido a costa de mucho recurso humano, muchas horas hombre y recursos materiales que se necesitan para hacerlo posible a casi bajo costo, y ofrecido a precios escandalosos en muchos casos.
Me pregunto qué es lo que mueve a nuestra gente a diario sin que lleguen a cansar sus espíritus, haciéndolos reclamar y construir otra realidad más acorde con lo netamente humano, como se hace en nuestros Parques de Estudio y Reflexión, una idea maravillosa del humanismo universalista que ya ha hermanado a mucha gente en el mundo.
Es un anhelo profundo que opera en la copresencia atencional, es una pequeña señal que busca ser amplificada, irradiada, hacerse patente y ser accionada de manera coherente, cual rayo láser; así se hace en estos ámbitos amables con amigos de una calidez humana sensacional.
“Si tú no piensas por ti mismo, alguien lo hará por ti; teme esa realidad cuando lo haga un político o un agente corporativo; decide ahora, decide tu vida y colorea tu espacio lo más que puedas; que tu buena influencia no se detenga.”
