Se puso recién en evidencia que en medios públicos, a los periodistas alemanes, frecuentemente se les limitan las alternativas de noticias que pueden dar, teniendo que ser enfocadas de acuerdo a las decisiones del gobierno federal. De esta manera, además de la manipulación periodística evidente referente al tema Rusia-Ucrania muy en especial, se ha ratificado en el presente año, a través de una entrevista emitida por la más destacada radio pública del país, que se suelen transmitir directivas políticas tanto escritas como verbales a los medios públicos germanos.
El 29 de enero del presente año, la entrevista arriba citada que brindó en directo el periodista Wolfgang Herles a la más destacada emisora de radio germana, Deutschlandfunk, generó, no obstante el silencio en los medios hegemónicos, cuando estalló una serie de comentarios críticos en varios medios digitales y redes sociales sobre esta revelación.
El señor Herles, ex vice-redactor jefe del canal de TV pública ZDF, señaló en esta entrevista que el redactor jefe de ZDF suele transmitir a los redactores mensajes políticos como líneas a favor de la Unión Europea y de las políticas de la Canciller federal Angela Merkel, incluidas instrucciones explícitas vía correo electrónico. En esta entrevista, habló de «instrucciones que vienen desde arriba, órdenes que siguen llegando actualmente«.
Más aún, en esta controvertida entrevista con Deutschlandfunk, el señor Herles se refirió a la época en la cual cumplió su rol de vice-redactor jefe del mismo ZDF y manifestó que en aquel entonces hubo igualmente «instrucción escrita de que el ZDF tuviese que brindar información periodística susceptible de propiciar la reunificación alemana«. Además, destaca que los medios públicos hacen «periodismo gubernamental» al omitir ciertos temas delicados, cuando sí cubren los eventos de la «agenda» del gabinete, a lo que argumentó que «esta política periodística nos lleva a un punto en el que la gente deja de confiar en nosotros«.
Incluso la jefa del principal medio público alemán, ARD, Karola Wille, asumió en una entrevista con el diario Tagesspiegel del 12 de enero de 2016, que se han perdido últimamente «confianza y credibilidad» en cuanto a los grandes medios de comunicación alemanes.
El periodismo euro-atlántico
Cabe recordar que en 2013 el reconocido catedrático Uwe Krüger de la Universidad de Leipzig publicó el libro titulado «La influencia de las élites en los medios hegemónicos», su tesis doctoral, en donde demostró la existencia de redes transatlánticas entre sectores políticos y económicos pudientes, especialmente europeo-norteamericanos, por un lado, y los redactores jefe de los más destacados periódicos privados germanos. Uno de los resultados de este estudio fue que queda establecido que los destacados diarios Welt (consorcio mediático Springer), Frankfurter Allgemeine Zeitung y Süddeutsche Zeitung, cuyos redactores jefes mantienen contactos muy seguidos con think tanks transatlánticos, se posicionan sistemáticamente a favor de los comunicados de la OTAN. De igual manera, el politólogo alemán Udo Ulfkotte, ex redactor del destacado rotativo Frankfurter Allgemeine Zeitung, publicó en 2014 un libro similar en donde puso en evidencia cómo los Estados Unidos de América y OTAN suelen «comprar a los periodistas» de medios hegemónicos alemanes, a través de varios grupos de presión y otras redes.
La información periodística sobre Ucrania
En este sentido, desde hace pocos meses, sube el número de casos en donde se evidencia la manipulación por parte de medios públicos en cuanto, particularmente, al conflicto entre Rusia y Ucrania, la misma que empezó a inicios de 2014, antes del golpe de estado ucraniano acaecido en febrero de 2014. En aquel entonces, en una emisión de TV pública se mostró por ejemplo material ilustrativo con militantes neonazis en Kiev quienes izaron varios símbolos fascistas inequívocos, cuando el reportero del medio público alemán comentó muy brevemente este material fílmico como mera «muestra de las distintas ramas de la oposición ucraniana», sin contextualizar ni mencionar la presencia neonazi evidente.
En el mes de diciembre pasado, la propia cadena ZDF, el único canal alemán gestionado a la vez por todos los Estados miembros y el gobierno federal, emitió un reportaje sobre el conflicto en el este de Ucrania, con el que pretendía demostrar la presencia militar rusa en el país, para lo cual hizo uso de actores y testimonios falsos. Puso en evidencia esta manipulación el portal en internet Sputniknews.com, el mismo que demostró el 23 de diciembre de 2015, que el canal ZDF presentó a tropas de Kiev en el este de Ucrania como si fuesen «invasores de Moscú». Este medio digital analizó con todo detalle que la principal persona entrevistada por ZDF cobró 50.000 rublos, que recibió previamente un guión para marcar las pautas de sus respuestas y que se inventó toda una identidad rusa virtual, según destacó luego la misma persona entrevistada, ante la TV rusa. Este caso de manipulación evidente fue incluso confirmado por el más destacado diario de Berlín, Tagesspiegel (prensa privada), el mismo que sostuvo que las entrevistas más importantes del mismo reportaje del canal ZDF fueron filmadas en las instalaciones de ZDF en Moscú. Según manifestó un colaborador de esta oficina de ZDF en la capital rusa ante el rotativo Tagesspiegel, fue la central de ZDF en Maguncia (oeste de Alemania) que dispuso directamente de este rodaje ficticio.
Denigración sistemática de medios no atlánticos
No obstante el mismo diario capitalino, Tagesspiegel, calificó el 31 de enero de 2015, al medio RT Alemán (cadena en lengua alemana del medio ruso RT) como «propaganda en el exterior», en un artículo titulado «Se dará por terminado RT Alemán?» especulando con la quiebra de RT Alemán por las dificultades financieras de Moscú, debido a las sanciones occidentales. Previamente, el Frankfurter Allgemeine Zeitung del 18 de noviembre de 2015 había publicado un artículo parecido en contra de la misma dependencia rusa en Berlín, sosteniendo que RT Alemán difundiría un «concepto del mundo [..] antisemita«, sin exponer el mínimo ejemplo para esta denuncia.
La información periodística anti-rusa va aumentando los últimos meses. En el diario más leído de Alemania, Bild, del 3 de febrero, se publicó una entrevista con el presidente ucraniano Petro Poroshenko, titulada “Putin ha abierto una guerra informativa contra Alemania”. Al respecto, hubo ya quejas ante las autoridades alemanas competentes por el irrespeto de la ética periodística en medios como la TV pública NDR. En una réplica dirigida por una asociación ciudadana germana al citado canal, se criticó que la redactora no comentó la aseveración del primer ministro ucraniano quien comparó en esta entrevista la presunta toma rusa de Crimea y la supuesta «agresión rusa contra Ucrania» con la invasión soviética hacia Ucrania y Alemania en 1944/45, sosteniendo que esta «agresión» rusa constituiría un «ataque al orden mundial y al orden europeo» (cabe mencionar que el presidente ucraniano se reunió nuevamente con la Canciller federal Merkel en Berlín, el 1° de febrero).
Simultáneamente, se está afianzando la línea periodística pública y privada en pro de la intervención germano-occidental en Siria (desde enero de 2016) en la medida que los más importantes medios como noticieros privados difunden en la actualidad la presunta necesidad de acelerar y fortalecer el intervencionismo bélico alemán: por ejemplo, en uno de los más destacados semanarios alemanes, Die Zeit, el periodista Jochen Bittner pidió recientemente que el ejército alemán conformara una «brigada sirio-alemana», junto con migrantes sirios radicados en territorio alemán.
Por otro lado, se está incrementando el número de rechazo irracional a la referida información periodística, especialmente referente al conflicto ruso-ucraniano. Hay cada vez más periodistas de medios públicos que se ven agredidos por manifestantes: según el Tagesspiegel del 13 de enero de 2016, una reportera de un medio público fue golpeada en el marco de una manifestación contra la inmigración masiva en la ciudad de Leipzig (este de Alemania). Paralelamente, aumenta la venta de periódicos xenofóbicos a nivel nacional. Según el Tagesspiegel del 25 de enero de 2016, el tiraje del periódico de extrema derecha Die Freiheit aumentó en un 16% entre fines de 2014 y finales de 2015. Se eleva actualmente a 26.000 ejemplares.
Fuentes sobre el caso del periodista de ZDF, HERLES
1. Video entrevista con «ZDF Journalist Wolfgang Herles», sobre entrevista Herles / Deutschlandfunk:
«Wir müssen so berichten, wie es Frau Merkel vorgibt»
https://www.youtube.com/watch?v=a9WDLGk16vY
2. Finanznachrichten, 29.01.2016, » ZDF-Journalist Herles: «Es gibt Anweisungen von oben»
Der Journalist und Publizist Wolfgang Herles, der jahrelang für das ZDF in leitenden Positionen tätig war, hat konstatiert, dass es im Sender «Anweisungen von oben» gebe. «Auch im ZDF sagt der Chefredakteur, ‘Freunde, wir müssen so berichten, dass es Europa und dem Gemeinwohl dient’. Und da muss er in Klammer gar nicht mehr dazu sagen, ‘wie es der Frau Merkel gefällt'», so Herles am Freitag im «Deutschlandfunk».
Solche Anweisungen habe es auch früher schon gegeben. «Es gab eine schriftliche Anweisung, dass das ZDF der Herstellung der Einheit Deutschlands zu dienen habe. Wir durften damals nichts Negatives über die neuen Bundesländer sagen – heute darf man nichts Negatives über die Flüchtlinge sagen – das ist Regierungsjournalismus».
Wolfgang Herles war in den 1980er Jahren stellvertretender Hauptredaktionsleiter Innenpolitik beim ZDF und Leiter des Bonner Hauptstadtstudios. In den letzten Jahren engagiert er sich beim ZDF im Bereich von Kultursendungen.
3. MMNEWS.de, «ZDF Journalist: Es gibt Anweisungen von oben»
| 30.01.2016 sobre entrevista Herles / Deutschlandfunk: http://www.mmnews.de/index.php/politik/64289-zdf-journalist-es-gibt-anweisungen-von-oben |
4. Soundvloud, sobre entrevista Herles / Deutschlandfunk:
https://soundcloud.com/dokumentor
5. ZUERST.de, 31.01.2016: » Wolfgang Herles über das ZDF: „Das ist Regierungsjournalismus“«: http://zuerst.de/2016/01/31/wolfgang-herles-ueber-das-zdf-das-ist-regierungsjournalismus/
