El presidente de Bolivia, Evo Morales, calificó de “ilegal” la instalación de una base militar chilena a quince kilómetros de la frontera entre ambos países y de los disputados manantiales del Silala.
América Latina
Morales denuncia instalación de base militar chilena
El presidente de Bolivia, Evo Morales, calificó de “ilegal” la instalación de una base militar chilena a quince kilómetros de la frontera entre ambos países y de los disputados manantiales del Silala.
«A quince kilómetros de Silala han instalado una base militar chilena. Yo no puedo entender por qué esta base. Primero, es ilegal si tomamos en cuenta los convenios internacionales (…). A quince kilómetros, ¿qué pretenden?», cuestionó el mandatario este domingo (08.05.2016) en un discurso en la región de Santa Cruz.
Desde hace tiempo, los manantiales en el suroeste boliviano son objeto de disputa con el país vecino. Bolivia sostiene que el Silala está formado por vertientes cuyas aguas fluyen a Chile por canales artificiales construidos en 1908, por lo que varias veces ha exigido una compensación económica al Gobierno chileno y a empresarios del norte de ese país.
“Instalación es agresión a Bolivia”
“Esta instalación es una agresión a la vida, a la patria y a Bolivia…”, sostuvo el mandatario y añadió que está convencido de que «no el pueblo chileno, sino grupos oligárquicos con pensamiento colonial instalan bases militares para agredir al pueblo boliviano».
Evo Morales se refirió así a la Segunda Brigada Acorazada «Cazadores» del Ejército de Chile, que estableció la base militar “Patrulla Carquimia” en la región de Tarapacá, a unos 15 kilómetros de la frontera con Bolivia.
Morales llevará disputa del Silala a CIJ
En marzo pasado, el presidente anunció la intención de su país de llevar el asunto de las aguas del Silala ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya al considerar que Chile hace un «uso abusivo» de este recurso natural.
Si la demanda es admitida, será la segunda causa que Bolivia mantendrá en la corte de Naciones Unidas contra Chile, donde desde hace tres años se dirime la centenaria reivindicación marítima boliviana.
El Gobierno boliviano calcula que la preparación de esta nueva causa legal tardará unos dos años y cifra en torno a mil millones de dólares la deuda que habría contraído Chile por el consumo de esas aguas durante más de un siglo.
Morales también señaló que es obligación de su país «en vez de buscar confrontación, acudir a estas instancias para que se haga justicia, pero en base a la razón».