En unas 200 ciudades se repitieron las manifestaciones, encabezadas por trabajadores y estudiantes. Numerosos servicios públicos paralizaron.
La reforma laboral propuesta por el Ejecutivo del presidente François Hollande se enfrenta a una dura oposición, como demostraron este jueves (31.03.2016) los más de un millón de franceses que salieron a las calles de casi 200 ciudades del país para expresar su descontento con la propuesta, conocida como “ley El Khomri” -por la ministra del Trabajo, Myriam El Khomri- y que es una de las medidas más controvertidas del gobierno socialista.
El proyecto de ley presentado la semana pasada pretende hacer más flexible el mercado laboral con el objetivo de reducir el alto desempleo. Los críticos consideran, en cambio, que los cambios son un retroceso social y exigen su retirada. A principios de marzo ya se manifestaron contra la ley más de 200.000 personas, según las cifras oficiales. Incluso dentro del mismo partido del presidente muchos parlamentarios consideran que la iniciativa beneficia a los patronos en detrimento de los trabajadores.
Las imágenes de enfrentamientos entre policías y jóvenes marcaron esta nueva jornada de protestas y huelga. En total, unas 30 personas fueron detenidas en todo el país, donde varios agentes resultaron heridos, blanco de los lanzamientos de piedras, botes de pintura y cócteles molotov, a los que respondieron con gases lacrimógenos y cargas policiales. Numerosos servicios públicos debieron paralizar o funcionar a mínimos. Incluso la Torre Eiffel permaneció cerrada.
Podría haber más protestas
El Gobierno se mantiene por el momento firme en sus planes con el argumento de que es necesario reformar el mercado laboral, como han hecho otros países vecinos, como Italia o España, que han reducido el desempleo. La ministra El Khomri sostiene que su ley favorecerá la contratación, en particular la indefinida, y rechaza que ataque los derechos de los trabajadores, sobre todo de los más jóvenes, protegidos según ella por la llamada “garantía juvenil”, que les asegura un subsidio.
El sindicato CGT estimó que fueron 1,2 millones de personas que participaron en las manifestaciones registradas en 250 ciudades, mientras que el Ministerio del Interior habló de 390.000. Las protestas se realizaron no sólo en las grandes ciudades, como París, Marsella, Lyon o Burdeos, sino que también se congregaron trabajadores y estudiantes en pequeñas localidades. Y los sindicatos ya anunciaron que si el Gobierno no cede, habrá más manifestaciones.
DZC (dpa, EFE)