Por María Eugenia Pirolo y Adriana Pucci.
En el corto intervalo de tres semanas ya son más de 200 escuelas tomadas por los alumnos de colegios estatales de San pablo, en Brasil. Las tomas comenzaron el 9 de noviembre y hasta el día de hoy, 1 de diciembre, el número crece exponencialmente. Esta toma se debe al posible cierre de 92 escuelas en el Estado de San Pablo dictaminado por el actual gobernador de esa provincia, Gerardo Alckmin (do PSDB), debido a una supuesta re-estructuración de ciclos lectivos donde se trasladarán miles de alumnos a establecimientos pre-existentes, cerrando así docenas de escuelas.
Las escuelas están siendo tomadas por alumnos de entre 13 a 18 años con el lema “no cierren mi escuela” de manera pacífica, horizontal y autogestiva. Desde la primera toma la herramienta de organización ha sido la asamblea y están dividiendo las tareas dentro de las escuelas por comisiones. Así cada alumno colaboran a través de una función ya sea comunicación, limpieza, actividades, seguridad, cocina, etc. Han creado una página en Facebook llamada “não fechem mihna escola” donde se comunican, se ayudan, se organizan y difunden lo que va ocurriendo entre las escuelas ocupadas de cada barrio.
Se han observado en las escuelas ocupadas una gran solidaridad y confianza entre los alumnos por ese objetivo común. También se ha observado una gran calma y firmeza con la cual esta generación ha decidido hacerse cargo de su historia. En su gran mayoría los profesores, padres y la comunidad ha apoyado desde el primer día a los alumnos llevando comidas y cuidando de la seguridad, entre otras cosas.También este apoyo se observa en elacompañamiento y respeto hacia las decisiones de los alumnos por gran parte de la comunidad educativa. Este respaldo se observó también en las redes sociales cuando comenzóa circular un formulario con la propuesta de dar talleres y clases de distintos temas en las escuelas ocupadas y, en menos de 8 horas, fueron computadas más de 1.200 ofertas de actividades voluntarias y gratuitas.
Los estudiantes están enfrentando muchas dificultades por parte del gobierno a través de la coacción de la fuerza policial y de sectores de la propia escuela como directores y algunos profesores. Los medios de comunicación afines al gobierno de Alkimin en un comienzo no daban visibilidad al conflicto, y al notar la fuerza de estos movimietos, comenzaron a informara la población de un modo tendencioso en contra de las tomas. Esto podemos verlo en los grandes medios de comunicación brasileños en sus ediciones gráficas, digitales y televisivas.Pero pese a todos estos esfuerzos de denigrar las ocupacones no han conseguido poner a la opinión pública en contra.
También las tomas han tenido un gran apoyo por parte de la mayoría de la población,no solo por parte de los jóvenes, padres y profesores, sino también, por parte de los movimientos sociales e instituciones gubernamentales. Prueba de esto fue la decisión unánimede cinco jueces del Tribunal de Justicia de San Pablo (TJ-SP) los cuales rechazaron el pedido requerida por el gobierno de Alkimin de cancelar la posesión de las escuelas ocupadas ydeterminaron, el dia 23 de noviembre, que se podían mantener todas las ocupaciones porparte de los alumnos, padres y profesores.
La tendencia de este movimiento por su permanente crecimiento es la de seguir inspirando nuevas tomas por parte de alumnos de otras escuelas. Todo esto, sin duda, genera muchos problemas para el gobierno y la secretaría de educación que no están acostumbrados a dialogar con la comunidad educativa.
Independientemente de los resultados la existencia de estos movimentos y estas ocupaciones son de suma importancia y está dejando en los alumnos una experiencia inolvidable que, sin lugar a dudas, cambiará el lugar de los jóvenes en la sociedad brasileña de hoy.
