El conversatorio “El Desarme Nuclear: claves para su abordaje periodístico” se presentó en CIESPAL con la participación de Tony ROBINSON y David ANDERSSON, representantes de la agencia de internacional de noticias Pressenza.
Hace 70 años el mundo se enfrentó a un fenómeno que dejó en la memoria imágenes en blanco y negro de consternación y destrucción, sin embargo en la actualidad no se discute sobre los daños que podría provocar una guerra nuclear y de los países que poseen armas de destrucción masiva; en base a esta reflexión inició su intervención ROBINSON para analizar el desarrollo de este tema en los medios de información y las medidas que se han ejecutado a nivel mundial.
Destacó la importancia de conocer las acciones que se han tomado en instancias internacionales como la ONU y las mesas de diálogo que se realizan; además de las iniciativas independientes como la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN), cuyo objetivo es movilizar a las personas de todos los países a expresarse sobre la prohibición de este tipo de armas.
“Es importante que la gente conozca sobre el negocio que se maneja detrás de esto y de las nuevas propuestas que se trabajan” expresó ROBINSON, destacando el trabajo periodístico de la agencia de noticias Pressenza, cuyo propósito es difundir este tipo de información y construir redes de apoyo.
Por su parte, David ANDERSSON analizó el papel de los Estados Unidos y cómo esta industria significa la base de su economía, por lo tanto cuentan con reservas de uranio, centros de investigación y escuelas militares que se especializan en armas nucleares.
“Nadie está interesado en hablar sobre el tema y ubicarlo en la primera página del diario” expresó ANDERSSON frente a la falta de atención de los medios de comunicación sobre esta problemática mundial. Además, destacó la importancia de formar un frente de acción desde Ecuador para que se sume al trabajo que se efectúa en otros países.
Posterior a las intervenciones el público opinó que es fundamental el trabajo con la comunidad y el cambio de conciencia; exigir una agenda mediática con nuevos actores y espacios generados por parte del gobierno de cada país.
