Por Jordi Jiménez
El pasado 9 de septiembre se inauguró la exposición fotográfica “La Fuerza de la No-Violencia” que se podrá visitar hasta el 9 de octubre’15 en el Centro Cívico Can Deu del barrio de Les Corts de Barcelona. En ella veremos imágenes de los fotógrafos René Gómez, Miguel Ángel Invarato, Ana Menéndez y Álvaro Orús que han cedido sus obras para esta exposición.
Hemos contado con la participación especial del grupo de expresión corporal “Dones de Blanc” (Mujeres de Blanco) que desde hace muchos años lleva a cabo una labor de denuncia de la violencia de género. Las fotos de René Gómez en la exposición muestran algunas de sus actuaciones.
Se ha dicho en multitud de ocasiones que la violencia presenta diversidad de formas, no sólo la más visible, la violencia física. En estos últimos tiempos hemos tenido innumerables ejemplos de violencia económica, de violencia religiosa (tanto en oriente como en el propio occidente), de violencia racial, psicológica, moral, etc. Continuamente vemos casos de violencia de género, maltrato infantil y otras situaciones que muestran una combinación de varias formas de violencia.
Pero lo que caracteriza y es común a todas esas presentaciones de la violencia siempre es la anulación de lo humano en el otro. La violencia en cualquiera de sus formas parte de la anulación de la intención del otro, de su subjetividad, de su libertad… en definitiva, es la visión del otro como “objeto” que puedo manipular según mi conveniencia, un objeto que me pertenece y que puedo usar a mi antojo ya que carece de intención propia y de capacidad de elección.
Y es por esto que la no-violencia nace del registro de humanidad en el otro, de la sensación profunda de que el otro es tan humano como yo, tan intencional y tan libre como yo.
A pesar de la violencia que ahora percibimos en muchos ámbitos y en todas partes el mundo, hoy es más posible que nunca el avance de la no-violencia. En este momento puede mundializarse la no-violencia, porque la época actual va hacia la mundialización. Nosotros no podemos evitar lo que ocurre, pero podemos intentar llevar a nuestro medio inmediato y de relación la posibilidad de una conciencia no-violenta, podemos ir creando una fina capa de conciencia a nuestro alrededor.
El ser humano tiene el equipamiento necesario para saltar por encima de sus instintos animales, por encima de su mecanicidad, tiene el equipamiento necesario para soltar, para comprender que dar es más que recibir y que el nosotros en más que el yo; tiene equipamiento para volar muy lejos…, todos lo tenemos. Todos podemos volar lejos, inspirarnos y dar a nuestras vidas una dirección deseada y querida en lo más profundo. Todos podemos hacerlo.
Sirva esta exposición fotográfica para alimentar al menos esta reflexión y encender esa posibilidad en todos nosotros.