Miles de funcionarios públicos recibieron en La Paz un certificado por haber aprendido a hablar el aimara al cumplirse ayer el plazo y entrar en vigencia la obligatoriedad, establecida en la Constitución Política del Estado y la Ley 269, de que todos los servidores estatales deben hablar al menos un idioma nativo.
En el acto de entrega de certificados, a los más de 3.100 funcionarios que completaron el curso de un mes, contó con la presencia del presidente Evo Morales, quien pronunció dos frases en aimara, al inicio y al final de su discurso, hablado en castellano.
En nueve años, 23.593 funcionase capacitaron en idiomas originarios.
En aplicación de la Constitución Política del Estado, el Gobierno promulgó el 2 de agosto de 2012 la Ley 269 General de Derechos y Políticas Lingüísticas, en la cual se ratificó la obligación de todo servidor público a hablar un idioma originario y se fijó el plazo de tres años, que feneció ayer, para que los funcionarios estatales que no sepan hablar un idioma indígena lo aprendan y empiecen a aplicarlo.
Ante la proximidad del vencimiento del plazo, a principios de julio pasado, el Gobierno organizó en La Paz un curso intensivo de aprendizaje de idiomas nativos destinado a los funcionarios.
En el país, hay más de 350.000 empleados estatales y en la Constitución están reconocidos como oficiales 36 idiomas originarios, además del castellano.
El director de la Escuela de Gestión Pública Plurinacional, Iván Iporre, señaló durante el acto que en nueve años esa entidad capacitó a 23.593 funcionarios de los diferentes departamentos del país en idiomas originarios y que el 57 por ciento optó por aprender aimara, según la agencia ABI.
“En el país hay 350 mil servidores públicos. Ahora estamos dando certificados a 2.520, pero inmediatamente en agosto estamos articulando en todos los departamentos. Ojalá hasta fin de año podamos cubrir a todos los servidores públicos”, señaló el viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas.
“Ahora Bolivia tiene identidad en todo el mundo, ahora tenemos dignidad. Y por eso saludo a quienes hacen mucho esfuerzo de cómo recuperar nuestro idioma para servir mejor al pueblo y quienes se preparan de manera consciente y honestamente para ser parte de este gran servicio al pueblo boliviano”, señaló Morales en su discurso durante el acto.
También recordó que cuando era niño hablaba aimara, pero en la escuela le enseñaron a leer y escribir en castellano y cuestionó a los maestros que decían que los pueblos indígenas “son etnias” y los idiomas nativos, “dialectos”.
“Los aimaras, los quechuas somos una nación, tenemos territorio, tenemos lengua propia, tenemos formas de organización administrativa, tenemos nuestra identidad”, sostuvo.
No serán despedidos
El ministro de Educación, Roberto Aguilar, aclaró ayer que por ahora, pese al plazo fijado por la Ley 269, los servidores no serán despedidos por no conocer un idioma nativo, pero sí deben participar de los cursos de capacitación, según la red Erbol.
Aguilar, quien reconoció que no sabe aimara pero que está como alumno, aprendiendo el idioma, anunció que el conocimiento de idioma nativo significará mayor puntaje en las evaluaciones de los funcionarios y que las personas que se postulen a cargos públicos y sepan hablar un idioma originario también tendrán una ponderación mayor.
El viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas, señaló que mayormente los viceministros, directores y jefes de unidad que están dando el ejemplo y pasan los cursos.
Destacó el interés del ministro de Economía, Luis Arce, quien dijo terminó el primer curso de aimara, “ha estado como alumno todos los días, creo que tiene una falta”, indicó.