Declaración de Convergencia de las culturas de Argentina
Buenos Aires, 31/07/15
El pasado miércoles 29 se realizó en Buenos Aires una conferencia de prensa en el acampe que QOPIWINI*, la organización de los pueblos indígenas de Formosa, sostiene en el centro de la ciudad esperando que el gobierno responda a sus demandas.
Jorge Palomo, referente del pueblo wichí y uno de los voceros de QOPIWINI expresó:
«Llevamos más de cinco meses acampando en la ciudad de Buenos Aires, a la intemperie, porque en la provincia de Formosa hemos agotado todas las formas para que nos escuchen y eso nunca sucedió. El gobierno no nos escucha. Nos preocupa el silencio del Gobierno Nacional. Nos preocupa el silencio de la Corte Suprema de Justicia. Nos preocupa el silencio del Senado de la Nación. Nos preocupa el silencio de los Diputados Nacionales. Nos preocupa el silencio de los medios de comunicación que simpatizan con el gobierno, porque parece que son cómplices de que no nos escuchen. Nos preocupa el silencio de la sociedad frente a este atropello que nos toca vivir…”
A los miembros de Convergencia de las culturas también nos preocupa el silencio, una demostración clara de indiferencia en unos, de insensibilidad en otros, una forma de reforzar la invisibilidad de lo que necesita hacerse visible.
Hoy este silencio afecta no sólo a los pueblos de Formosa sino a comunidades de todo el país que reclaman por derechos consagrados e incumplidos, violados por sectores económicos, por los estados provinciales y nacional y por la justicia.
La difusión, en cambio, la denuncia y la información a todo aquel a quien se pueda llegar, ha sido siempre el recurso del que necesita defenderse, especialmente cuando los que podrían resolver sus demandas son parte del problema. Nosotros apoyamos la persistente lucha de los pueblos indígenas por el ejercicio efectivo de sus derechos, por eso difundimos lo que les pasa: para ayudar a hacer visible una injusticia sostenida por siglos y que sigue afectando la vida de miles de personas en el país y en todo el continente.
Este no es un problema folklórico o de progreso–retraso. Aquí hay un choque entre dos culturas: la de los hijos de la tierra y la insaciable cultura del dinero. Unos, porque la tierra es su vida, otros porque la quieren para hacerse más ricos.
Así, los pueblos indígenas son víctimas de las multinacionales que esgrimen su voracidad sin fronteras, y se lanzan sobre los recursos naturales como verdaderos depredadores. Y son víctimas de los depredadores de fronteras adentro que les alambran los campos, les impiden el acceso a los ríos y el monte, les siembran soja sobre los cementerios y lugares sagrados… Y nada de eso sucede con ingenuidad: se permite o se alienta.
A pesar de que en los últimos años los gobiernos de nuestros países han hecho avances innegables en muchos campos, este es un tema que en sus raíces y sus cuestiones centrales sigue sin el debate que merece, sin atención ni solución. Nuestra función no es resolver esas contradicciones o disimularlas.
Hoy llegan a Buenos Aires 60 indígenas de comunidades formoseñas para sumarse al reclamo de QOPIWINI. Nos ha parecido una buena oportunidad para hacer esta declaración confirmando nuestro apoyo y nuestro compromiso de seguir trabajando para superar toda forma de discriminación, para hacer visibles conflictos, avances, modos de pensar y sentir de estas culturas que son parte de nuestra propia identidad.
* El nombre completo de la organización es QOPIWINI LAWFETES. QoPiWiNi resulta de unir la designación de las 4 etnias: Qom, Pilagá, Wichí y Nivaclé. LAWFETES es vocablo wichí y significa “una base de todo, una raiz bien fuerte, el comienzo de algo, el fundamento”.