Pierre Stambul entrevistado por la Dra. Milena Rampoldi.
Buenos días desde la Redacción de ProMosaik e.V.,
Me enorgullece presentarles hoy mi primera entrevista, una muy interesante con el Sr. Pierre Stambul, profesor de matemáticas en Marsella, copresidente de la Unión Judío-Francesa para la Paz, de la que es miembro igualmente la señora Perrine Olff-Rastegar, a quien ya entrevistamos hace unas semanas. La Unión Judío- Francesa para la Paz es una organización pacifista y antisionista muy importante puesto que Francia cuenta con la comunidad judía más numerosa de Europa.
Dra. Milena Rampoldi: ¿Cuáles son las diferencias fundamentales entre el judaísmo y el sionismo?
Pierre Stambul: El judaísmo es un concepto religioso, es la forma tomada por la religión judía hace 2000 años aproximadamente. El judaísmo religioso actualmente muestra varias tendencias, en particular, los jaredíes (judíos ortodoxos) o, en el extremo opuesto, el judaísmo liberal, por ejemplo
Desde fines del siglo XIX, una parte importante de los judíos (sobre todo en Europa) deja de ser creyente. Se puede hablar de “judaísmo laico”, numerosas personalidades han pertenecido a esa corriente (Einstein, Freud, Arendt, Kafka y otros). Entre esos judíos no creyentes se desarrolló un importante movimiento de judíos progresistas o revolucionarios, que consideraron que su emancipación es inseparable de la de la humanidad.
El sionismo es una ideología. Es una teoría de la separación que considera que judíos y no judíos no pueden vivir juntos. Es un colonialismo dirigido a expulsar al pueblo autóctono (los palestinos). Es un nacionalismo que inventó un pueblo, un idioma, la tierra. Es una manipulación gigantesca de la historia, de la memoria y de las identidades judías. Para los sionistas, los judíos han vivido 2000 años en el exilio y ahora regresan a su país. Es una historia completamente inventada.
La mayor parte de los fundadores del sionismo no eran creyentes, pero utilizaron la Biblia como un libro de conquista colonial.
El sionismo se estructuró en contra del judaísmo, tanto del laico como del religioso. ¿En qué parte de la historia reciente del judaísmo encontramos el racismo, el militarismo o la negación del otro?
Dra. Milena Rampoldi: ¿Cómo quiere usted apoyar al pueblo palestino? ¿Cuáles son las mejores estrategias?
La guerra que el Estado de Israel lleva a cabo contra el pueblo palestino no es ni racial, ni religiosa, ni comunitaria. Interesan las cuestiones fundamentales: el rechazo al colonialismo y al racismo, la igualdad de los derechos. Del mismo modo que es muy importante que exista en Israel una pequeña minoría de anticolonialistas, es muy importante que exista en Francia un componente judío en el movimiento de solidaridad con Palestina. Podemos explicar desde adentro el corrimiento ideológico en obra. Como a menudo el genocidio nazi y el antisemitismo es nuestra historia íntima y familiar, podemos más fácilmente denunciar el carácter obsceno del sionismo desde el momento que considera como antisemita toda crítica a Israel.
A veces nos dicen: “Ustedes son valientes”. No, nos estamos salvando de morir. La ideología sionista no solo es criminal contra el pueblo palestino, es absolutamente suicida para los judíos, sean laicos o religiosos.
Recordemos que existió durante muchos siglos una tradición judía universalista, muy comprometida en todas las luchas progresistas. Queremos ser los herederos de esa tradición. Como lo dice el militante israelí anticolonialista Eitan Bronstein: “No seremos libres mientras los palestinos tampoco lo sean”. Nuestra presencia en el movimiento de solidaridad le da sentido a esto de “vivir juntos en igualdad de derechos”, que es el único desenlace no barbárico de esta guerra. Al mismo tiempo, nos vinculamos en Francia con todas las luchas contra las discriminaciones y el racismo.
Dra. Milena Rampoldi: ¿Qué significa para usted la paz, como judío francés?
Pierre Stambul: En Israel, todos están por la “paz”. Para ellos significa: “déjennos en paz”. Quieren mantener el hecho consumado colonial. Para nosotros la paz es ante todo el reconocimiento del crimen fundador, la Nakba en 1948, cuando la mayoría de los palestinos fueron expulsados de su país de manera deliberada. La paz es la reparación de ese crimen. El hilo conductor es el derecho internacional y la igualdad de derechos. Es injusto e ilusorio repetir el proceso de Oslo, que está muerto y enterrado. El sionismo fragmentó a Palestina en diversas entidades que están discriminadas y oprimidas: Cisjordania (fragmentada en tres zonas), Jerusalén Este, Gaza, los palestinos de Israel, los refugiados, los prisioneros…). El llamado palestino al BDS (Boicot, Desinversión, Sanciones) de 2005 ilustra cuáles son las pistas de la paz. Reclama la libertad (el fin de la ocupación, de la colonización, destrucción del muro, fin del bloqueo a Gaza, liberación de los prisioneros), la igualdad (para los Palestinos de Israel que sufren el apartheid) y la justicia (derecho de los refugiados al retorno).
En tanto que francés judío, agrego que, cuando Netanyahu viene a Francia a explicarnos que nos equivocamos, que somos extranjeros aquí y que nuestro país es Israel, nos pone deliberadamente en peligro. La paz es el fin de esta concepción asesina dirigida a separar a los judíos del resto de la humanidad, expulsando a los palestinos.
Dra. Milena Rampoldi: ¿Cuáles son los objetivos fundamentales de la Unión Judío-Francesa para la Paz?
Pierre Stambul: En el Oriente Medio, nosotros luchamos por una paz fundada en la igualdad de derechos y la justicia. Compartimos plenamente las reivindicaciones exigidas por el llamado al BDS. La Unión Judío-Francesa por la Paz forma parte del BDS-Francia. El tema de las sanciones es fundamental. Nada va a cambiar en tanto este Estado criminal no deba responder por los actos de sus dirigentes. La UJFP apoya la resistencia palestina y a los anticolonialistas israelitas. Populariza sus escritos y sus actos.
En Francia, impugnamos el derecho de las asociaciones judías comunitarias a hablar en nombre nuestro cuando en realidad apoyan incondicionalmente los crímenes del ocupante. Denunciamos la forma en que instrumentalizan el antisemitismo. Luchamos contra todos los racismos (el antisemitismo, la islamofobia, etc.) y todas las discriminaciones (Romaníes, Indocumentados y otras).
Dra. Milena Rampoldi: Explique esta frase para nuestros lectores: El sionismo representa para la historia del judaísmo un poco de lo que representa Milosevic para la historia del pueblo serbio.
Milosevic había afirmado que Serbia se extendería en todas las regiones donde los serbios vivían o habían vivido. Rearmó la historia de Serbia. Antes de la llegada de las guerras de Yugoslavia en Kosovo Polje, había dado un discurso revisionista ante centenares de miles de serbios, afirmando que en 1389 los serbios se habían sacrificado para salvar al Occidente contra los turcos musulmanes y los albaneses se habían asimilado a ellos. Y durante la guerra, incluso si hubo atrocidades en todos los campos, ordenó acciones terribles: violaciones colectivas, campos de concentración, bombardeos masivos de ciudades sitiadas y más.
Sin embargo, en su gran mayoría, el pueblo serbio había tenido un comportamiento ejemplar contra la ocupación nazi. La resistencia yugoslava -en gran parte compuesta por serbios- al rechazar el nacionalismo y las divisiones étnicas liberó una gran parte del país. Ningún pueblo, ninguna comunidad humana, está a salvo de no derrapar colectivamente hacia la barbarie.
El sionismo nació como respuesta al antisemitismo, pero su respuesta fue terrible: la conquista colonial y la limpieza étnica. Igual que Milosevic, los sionistas inventaron una historia idílica (la teoría del exilio de los judíos y de su “retorno”). Pero esta historia es una manipulación como lo fue la teoría de la “Gran Serbia”. El sionismo se construyó contra el judaísmo, laico o religioso. Para fabricar al nuevo israelita hubo que destruir al judío y sus valores universalistas.
Dra. Milena Rampoldi: ¿Cómo se puede cambiar a los medios actuales en la lucha por los derechos de los palestinos?
Pierre Stambul: Para los medios es muy cómodo pensar que, “los árabes están con los palestinos y los judíos por Israel”. Es práctico hacer de esta guerra una guerra religiosa o comunitaria, cuando en realidad es una guerra colonial. Salvo durante la masacre de Gaza del verano pasado, los medios, en general, han ignorado a la UJFP. Cuando nosotros intervenimos en las conferencias, suelen decirnos: “No sabíamos que había judíos como ustedes”. En las manifestaciones, la pancarta común que tenemos con nuestros compañeros de la Asociación de Trabajadores Magrebíes de Francia (“Judíos y árabes unidos por la justicia”) atrae mucho, y la gente adhiere a nuestras asociaciones. Poco a poco nuestra voz será escuchada. Para los medios, con frecuencia palestino es igual a terrorista. No obstante, si hay un país que estuvo gobernado por auténticos terroristas (Menachem Begin e Ytzhak Shamir), es Israel.
Un vídeo importante:
