Conversamos con el referente humanista de Vicente López, Daniel Ferreyra, para conocer la situación del distrito y las propuestas que promueve el Partido Humanista y el candidato del norte de Buenos Aires en particular.
¿Cómo está Vicente López, cómo se vive en esa localidad?
Desde nuestra visión humanista los vecinos de Vicente López merecen vivir mejor. El gobierno del actual intendente Jorge Macri no ha sido para nada bueno, todo lo contrario. Se ha gastado muchísimo dinero innecesariamente, sin contar los aumentos de impuestos que han llegado al 500 por ciento y barrios que han quedado olvidados, ya que desde la ruta Panamericana para el lado de Munro y aledaños parece que fuera otro municipio.
Macri habla como si la seguridad fuera un tema resuelto, ¿es así?
No, para nada, porque no se trata de poner «guardianes de calle», como los llama el municipio, se trata de accionar en el medio con educación. Ningún ser humano pide nacer en condiciones de pobreza extrema, o de violencia familiar. Debemos separar la seguridad de la «portación de cara» que impone este tipo de gobierno. Estamos en un mundo dado, el que tiene no pide nacer en esa abundancia, pero no tenemos que mortificarlo diciéndole que aquel que no tiene viene por lo que ha heredado. A la inversa, quien nace en condiciones de pobreza, debe comprender que la violencia no es la salida de esta penosa situación. Este gobierno municipal no hace nada para colaborar con las condiciones en las que viven vecinos y comerciantes, de plena desconfianza y temor que se traslada desde ya a toda la provincia, muchas veces porque algunos medios de comunicación se aprovechan de penosas situaciones, que si bien existen, podrían evitarse con gente dedicada a recorrer los barrios y concientizar a la gente de que la salida de la violencia no se logra con más violencia. Los humanistas somos muy claros en eso, la violencia se aprende, la noviolencia también.
¿Y cómo está el tema de la salud en Vicente López?
La salud está en una situación preocupante, basta con ir al hospital y ver el trato que se les da a nuestros viejos. Horas de espera para una simple consulta y ni hablar de sacar turno con algún especialista, se tarda hasta cinco meses. Muchas personas necesitan operarse y no hay turnos ni camas, es un sistema colapsado, no se ha invertido bien, dejando así muy desguarnecidos a los vecinos con menos recursos entre los que se encuentran ancianos y niños. También podemos decir que Vicente López cuenta con los recursos para solucionar estos y otros temas, ya que es el municipio más recaudador de Latinoamérica, superando inclusive al vecino San Isidro.
¿Cuáles son las propuestas para las clases más pudientes?
Conozco bien el territorio, trabajar en el ramo de la salud me ha dado, estos años, estar muy cerca de los vecinos de La Lucila, Olivos, Vicente López y también de Munro. La gente no puede vivir pensando en que el mes que viene le van a aumentar los impuestos y de paso pensar que cualquier obrero que camine por Bouchard y Díaz Vélez es un posible asaltante. Volvemos el principio, esto se solucionaría con educación, por ello proponemos que se abra en forma urgente una consulta al pueblo de Vicente López, para que los vecinos puedan elegir cómo pueden buscar soluciones a sus problemas. Esto no se arregla con Metrobus, dicho sea de pas un negocio que se ha manejado de manera muy secreta.
¿Y la educación, que nombraste varias veces, cómo está el sistema educativo en Vicente López?
Ausente. Los chicos no están incentivados, se aburren, hay que sumar al grupo familiar, hacerlos partícipes del proceso educativo de nuestros pibes. Acá no se trata de si vas al Lasalle o a la escuela 31 , se trata de que la familia participe, de nada sirve enseñar solo en el colegio, los chicos también tienen que ser los protagonistas, ellos son quienes deben superarse y nuestra tarea como adultos es escucharlos. Cuando tuvimos el privilegio de llevar a cabo talleres por la noviolencia escolar, nos llevamos muchas sorpresas, gratas desde luego. No hay que subestimar a los chicos, hay que escucharlos, tienen mucho que decir.
Muchas organizaciones sociales hacen el trabajo que el municipio tendría que estar haciendo, poniendo al ser humano como valor central, en este caso a los estudiantes. Esa es nuestra consigna. De nada sirve un niño rico que crece con miedo, de nada sirve un niño pobre con su panza llena si no recibe la educación de calidad que se merece, en nuestro caso una educación por la noviolencia. Es una cuestión de intercambio, Vicente López merece vivir mejor, sin dudas, pero no se realizará esto si se está polarizado socialmente. Creemos que todos pueden superarse y entiendo, como humanista, que la superación del dolor y el sufrimiento humano, no el físico, se da desde lo interno. Rechazando toda forma de violencia, física, institucional, religiosa, económica y racial. Lamentablemente, mucho no se hizo al respecto desde el municipio de Vicente López, siempre son otros los que intencionan esas cuestiones culturales y de diversidad. Otras organizaciones que contienen y sacan a chicos de condición de calle, los humanistas trabajando en las escuelas, etcétera.
No se puede realizar un proyecto municipal con bases de desigualdad social y pánico, si se hará con educación. Empezar en Vicente López debe ser nuestra tarea.