El presupuesto de arrestos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos incluye un mandato del Congreso que indica que al menos 34.000 inmigrantes deben permanecer detenidos en una base diaria, una cuota que ha crecido de manera constante cada año, aun cuando la población de inmigrantes indocumentados en los Estados Unidos se ha estabilizado. Las prisiones privadas se han beneficiado ampliamente de esa política, estando en su posesión nueve de los 10 centros más grandes de detención del ICE, según un informe publicado este mes por Grassroots Leadership.
En 2009, en medio de una disminución de varios años de la población inmigrante indocumentada, el senador Robert Byrd (D-WV), entonces Presidente del Subcomité de Asignaciones de Seguridad Nacional, insertó el siguiente texto en relación con el presupuesto de arrestos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos en el Acta de 2010 del Departamento de Seguridad Nacional: «… los fondos a su disposición en esta partida deberán mantener un nivel de no menos de 33.400 camas para detenidos”. Esta directiva estableció lo que se convertiría en una controvertida política interpretada por el ICE como un mandato para contratar y llenar 33.400 (aumentó en 2013 a 34.000) camas para detenidos en una base diaria. La Directiva vendría a ser conocida como la «cuota de detención de inmigrantes» o “la cuota de camas”. El número de arrestos de inmigrantes no tiene precedentes; ninguna otra agencia del orden público opera bajo una cuota de detención por mandato del Congreso.