La Organización de las Naciones Unidas ha lamentado el “fracaso colectivo” de los líderes mundiales para generar mayor igualdad de género respecto a las metas fijadas hace veinte años y ha advertido de los peligros que están expuestas contra las mujeres en zonas de conflictos armados.
“En muchas partes del mundo es más peligroso ser mujer que ser soldado”, ha afirmado La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, en una rueda de prensa celebrada el viernes en la sede de Naciones Unidas y con el motivo de Día Internacional de la Mujer (el 8 de marzo).
La alta funcionaria internacional ha mencionado los progresos que ha habido hasta ahora a partir de los compromisos asumidos en 1995 en Pekín (China) en la IV Conferencia Mundial sobre la Mujer, con un avance que desde entonces ha sido “muy lento”.
Esa plataforma fue “muy ambiciosa y altamente práctica” y se fijó en un momento de gran esperanza. Incluso, los líderes de 189 países que firmaron los compromisos pensaban que se iba a completar esa agenda en 2005. “Bueno, ya sabemos qué pasó”, ha declarado Mlambo-Ngcuka.
Se espera que el progreso en esas metas sea presentado por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en una reunión que comenzará el próximo lunes, con la presencia de altas personalidades.
La revisión que se ha hecho en 167 países demuestra que el progreso ha sido “desigual y muy lento”, con algunas áreas en las que, de hecho, “ha habido retrocesos”.
Al referirse a los nuevos conflictos en el mundo como los ataques del terrorista de EIIL (o Daesh en árabe), Mlambo-Ngcuka ha recordado que el 70 % de las víctimas en los conflictos son mujeres y niños.
La alta funcionaria de la ONU ha consultado consultada también si, teniendo en cuenta que Naciones Unidas viene fomentando la igualdad de género, llegará un día en que la organización llegue a estar liderada por una mujer, y ha recordado que ONU Mujeres siempre ha fomentado la incorporación de mujeres en los niveles más altos del liderazgo.