EL NUEVO MITO
Para comenzar de un modo positivo… En nuestro tiempo, la humanidad ha definido el mundo que quiere y el mundo que no quiere, estamos avanzando hacia el entendimiento y la paz mundial. Esta tendencia se esta expresando en varios frentes: en las relaciones entre naciones, en los nuevos movimientos políticos y en la actitud de las personas.
Hoy en día, nuestro planeta se ha convertido en un territorio interconectado fácilmente, en el que de forma instantánea fluye la información, así, los procesos sociales se han convertido también en instantáneos, comparados con acontecimientos históricos de siglos atrás. El aislamiento o la independencia del “proceso global” es actualmente inconcebible. Si habrá progreso, será de todos y para todos. Por ello, destacar los aspectos positivos de una parte de nuestro mundo, es hacerlo de toda la humanidad.
Como sabemos, igual que hay una tendencia muy positiva existe también un importante campo de resistencia a la evolución y al respeto hacia otros seres humanos. De hecho, se ha comenzado a hablar por todas partes del regreso de la Guerra Fría y de la posibilidad de una 3ª Guerra Mundial; situaciones “muy preocupantes” principalmente para un mundo occidental cuyo hábito es generar el caos, y desentenderse, afuera de sus fronteras.
La línea divisoria entre el humanismo y el antihumanismo es hoy la misma línea convulsa que separa Oriente de Occidente, cuya ideología de fondo es el mito de nuestro tiempo, “el mito del dinero”: el dinero lo es todo y lo justifica todo (1). Esta ideología dominante se esta expresando actualmente de modo extremo, chocando con el trasfondo de otras sociedades, como la religión, la familia, o la patria. Y más allá, un nuevo mito se muestra levemente…
«El ser humano en su bondad, en la eliminación de las contradicciones internas, en sus actos conscientes y en su sincera necesidad de evolución, hace nacer su espíritu. Para la evolución son necesarios el amor y la compasión. Gracias a ellos es posible la cohesión interna y la cohesión entre los seres que posibilitan la transmisión del espíritu de unos a otros. Toda la especie humana evoluciona hacia el amor y la compasión. Quien trabaja para sí en el amor y la compasión, lo hace también para otros seres». (2)
Es deseable que esta cita “descontextualizada”, atribuida a Silo, eleve nuestro nivel de conciencia y con ello nuestra capacidad de comunicar aquello que realmente importa, aquello que no encuentra su contexto en la prehistoria actual. Tenemos la expectativa de que algún día las sociedades se orientarán bajo ese designio, de modo que lo personal, lo espiritual y lo social no serán temáticas tan diferenciadas. Entonces el mayor interés mundial será ayudar a producir el bienestar de otras naciones y de todo lo viviente.
Claro que a ese “nuevo mito” le queda todavía mucho, si es que puede ser comprendido en nuestro habitual registro del tiempo.
GEOPOLÍTICA COMUNICACIONAL-ESPACIAL
No es mucho lo que la gente de a pie podemos hacer en relación a los asuntos mundiales, sin embargo esta afirmación es paradójica, pues la opinión pública importa, y mucho, a los grandes sistemas.
La reciente crisis cibernética entre EEUU y Corea del Norte es una clara muestra de las grandes tensiones comunicacionales entre Oriente y Occidente. Estados Unidos atribuye a Corea del Norte el masivo ataque informático que atenazó a la multinacional Sony Pictures semanas atrás. Fuentes anónimas del FBI citadas por The New York Times, CNN y Associated Press confirmaron que Pyongyang está detrás de la represalia contra la compañía por la película “La Entrevista”, típico film hollywoodiense propagandístico sobre un intento de asesinato del presidente norcoreano, Kin Jong-un.
La carrera de las telecomunicaciones va de la mano de la carrera espacial. Durante el pasado año los proyectos espaciales se han intensificado. Por ejemplo, el ARSAT-1, lanzado en octubre, ofrecerá una amplia variedad de servicios de telecomunicaciones como telefonía, televisión y transmisión de datos, a Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay. También India días después lanzó su satélite IRNSS-1C.
A mediados de mayo, el Kremlin –tras 15 años– anunció el fin de su colaboración con la Estación Espacial Internacional (ISS) como reacción a las sanciones estadounidenses impuestas en el marco de la crisis ucraniana. En noviembre astronautas chinos viajaban a bordo de la nave tripulada rusa Soyuz que es parte del programa espacial de la antigua Unión Soviética.
Finalmente, las temidas sospechas de EEUU respecto a la relación entre Rusia y China en materia espacial se confirmaron (3). Un día después de que China lanzara Yaogan-26 -calificado en Occidente como un integrante de la creciente familia de satélites espías- el 28 de diciembre de 2014 fue anunciada la alianza espacial entre China y Rusia, que manifiestamente busca desplazar los programas que oferta Occidente, a raíz de su escasa credibilidad ante los escándalos de espionaje develados por el exagente estadounidense Edward Snowden, como uno entre tantos motivos.
No cabe duda de que el equilibrio y la futura paz mundial dependerá en gran medida de todo este despliegue vertiginoso que están realizando los BRICS.
Pero las sorpresas suman y siguen. Esta vez en materia de comunicación logística. El 18 de noviembre salió de China, el primer tren transportando 82 contenedores con más de 1.000 toneladas de mercaderías que llegó a Madrid el 9 de diciembre.
«Es un día que debería vivir para siempre en la historia», en palabras del Pepe Escobar, en su artículo “Integración eurasiática contra el Imperio del Caos” del que trascribimos algunos párrafos.
«Con más de 13.000 kilómetros, atravesará regularmente la ruta de carga ferroviaria más larga del mundo, 40% más lejos que el legendario Transiberiano. Su carga atravesará China de este a oeste, luego Kazajistán, Rusia, Bielorrusia, Polonia, Alemania, Francia, y finalmente España».
«…es la primera piedra de base en la “Nueva Ruta de la Seda” de China, concebiblemente el proyecto del nuevo siglo e indudablemente la más importante historia comercial en el mundo para la próxima década».
«Estamos hablando de una estrategia nacional que apunta a basarse en el aura histórica de la antigua Ruta de la Seda, que cruzaba y conectaba civilizaciones, este y oeste, mientras creaba la base para un vasto conjunto de zonas pan-eurasiáticas de cooperación económica entrelazadas. La dirigencia china ya ha dado luz verde a un fondo de 40.000 millones de dólares, supervisado por el Banco Chino de Desarrollo, para construir carreteras, líneas de trenes de alta velocidad, y conductos de energía en diversas provincias chinas. El fondo se expandirá más temprano que tarde para cubrir proyectos en el Sur de Asia, el Sudeste Asiático, Medio Oriente, y partes de Europa».
«La Ruta Marítima de la Seda comenzará en la provincia Guangdong en ruta al Estrecho de Malaca, el Océano Índico, el Cuerno de África, el Mar Rojo y el Mediterráneo, terminando esencialmente en Venecia, lo que ciertamente sería una justicia poética. Pensad en ella como Marco Polo a la inversa».
«…mezclad la estrategia de la Ruta de la Seda con el aumento de la cooperación entre los países de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), con una cooperación acelerada entre los miembros de la Organización de Cooperación de Shanghái (SCO), con un papel chino más influyente en el Movimiento de No-Alineados (NAM) de 120 miembros – no es sorprendente que exista la percepción en el Sur Global de que, mientras EE.UU. sigue embrollado en sus interminables guerras, el mundo está fluyendo hacia el este».
«…la abrumadora mayoría de las naciones asiáticas sobre el “ascenso pacífico” descrito por la propia China, ya está dando la espalda a un mundo comercial dominado por Washington y la OTAN y el conjunto de pactos –de la Asociación Transatlántica para el Comercio e Inversión (TTIP) para Europa y del Acuerdo de Cooperación Trans-Pacífico (TPP)– que lo acompaña».
«Todos estos eventos interconectados sugieren un desplazamiento tectónico geopolítico en Eurasia que los medios de comunicación estadounidenses no han comenzado a comprender. Lo que no significa que nadie se dé cuenta de nada. Se puede oler el pánico incipiente en el establishment en Washington».
«En el mismo momento en que China propone una nueva integración eurasiática, Washington ha optado por un “imperio del caos”, un sistema global disfuncional, que ahora alimenta el caos y el retroceso en todo el Gran Medio Oriente hacia África e incluso a las periferias de Europa».
«A largo plazo, parece ser posible. Algún día, Alemania podría conducir a partes de Europa lejos de la “lógica” de la OTAN ya que los dirigentes empresariales e industrialistas alemanes piensan en el futuro potencialmente lucrativo en una nueva Eurasia. Por extraño que pueda parecer en medio de la actual guerra de palabras respecto a Ucrania, todavía es posible que el juego final involucre una alianza Berlín-Moscú-Pekín».
En fin, extraordinario artículo de Pepe Escobar que vale la pena leer en detalle. (4)
Observamos que la alianza en el mundo de los BRICS se ha acrecentado y perfeccionado durante el pasado año. Mientras Rusia se ha visto abocada a ejercer una confrontación directa con Estados Unidos –llegando a la extenuación en su rol ajedrecista y pacificador en Ucrania– China ha podido ir avanzando silenciosa pero aceleradamente, con el apoyo creciente de Latinoamérica. En cambio Europa carece de manual de ruta para los años sucesivos, más allá de su reinvención del fascismo y de su obediencia a los dictámenes de Washington.
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1: Silo. Obras Completas vol.1. Prólogo de Mitos Raíces Universales.
2: Extracto de una charla de 2002 atribuida a Silo.
3: EE.UU, “en guardia” por el predominio cibernético y espacial de Rusia y China RT 31-01-2014
4: Integración eurasiática contra el Imperio del Caos Asia Times y Rebelión 23-12-2014
