El conservador Luis Castañeda consolidó su elección como alcalde de la capital peruana, según los resultados oficiales parciales que le asignan 49 por ciento de los votos, en los comicios regionales y municipales de la víspera. El jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Mariano Cucho, dio la cifra la pasada medianoche, como resultado del escrutinio de 46,9 por ciento de las actas procesadas en la plaza más importante en juego.
En la pugna por la alcaldía provincial limeña el segundo se ubica, indicó el funcionario, el postulante del socialdemócrata Partido Aprista, Enrique Cornejo, quien en los últimos días mejoró su preferencia por una serie de factores imprevistos hasta alcanzar 19,4 por ciento.
Relegó así al tercer lugar a quien era considerada segura escolta de Castañeda, la alcaldesa centroizquierdista de la ciudad, Susana Villarán, quien según el resultado parcial tiene 11,1 por ciento.
El conservador Salvador Heresi se ubicó cuarto con 6,3 por ciento, mientras otros nueve postulantes figuran con menos de tres por ciento.
El triunfo de Castañeda fue reconocido ayer mismo por sus contendores y la alcaldesa Villarán le ofreció ayuda para una transición ordenada, y planteó que las obras y reformas que ha iniciado y no ha podido terminar durante su gestión cuatrienal, deben ser completadas por la nueva administración
Castañeda, primer alcalde limeño elegido por tercera vez, ejerció el cargo durante dos mandatos, entre 2003 y 2010, y lo dejó para ser candidato presidencial en 2011, habiendo fracaso. Anoche aseguró que de ninguna manera buscará la jefatura del Estado en los comicios generales de 2016.
Por su parte, el aprista Cornejo celebró el resultado como una victoria, mientras los comentaristas destacan que supo guardar distancias de su cuestionado partido y del desgaste de la imagen de su líder, el expresidente Alan García, para ganar votos de independientes.
Entretanto, en las elecciones de gobiernos regionales el aprismo no ganó ni una de las 25 regiones y perdió la única que le quedaba, la de La Libertad, logrando solo dos segundos lugares en la región Lima-Provincias y en Amazonas, dos jurisdicciones con escasos electores.
En Lima los resultados fueron derrotas para Diálogo Vecinal, el grupo con cuyo nombre compitió Villarán, y el aprismo, habiendo este último perdido los únicos municipios distritales que tenía en sus manos.
También perdió posiciones el conservador Partido Popular Cristiano, al pasar del segundo a los últimos lugares en la capital y acumular derrotas en casi todas las regiones.
Para la oposición de izquierda, el principal logro fue el triunfo del reelecto presidente regional de la norandina Cajamarca, Gregorio Santos, quien alcanzó 49,9 de los votos pese a estar preso por cargos de corrupción que rechaza.