La campaña «No al Tratado Transatlántico de Comercio e Inversión» acusa a la UE de intentar silenciar las voces opuestas a dicho acuerdo secreto
La Comisión Europea ha rechazado hoy la propuesta para realizar una Iniciativa Europea Ciudadana contra los acuerdos comerciales UE-Estados Unidos y UE- Canadá (conocido como TTIP y CETA, por sus siglas en inglés respectivamente). Esta decisión impide a la ciudadanía recoger un millón de firmas para obligar a la Comisión Europea a que revise su política comercial y a que se celebre una audiencia pública en el Parlamento Europeo sobre la materia.
Las negociaciones por parte la Unión Europea de dos peligrosos tratados con Estados Unidos y Canadá, a espaldas de la población, han provocado una fuerte oposición en Europa, los EE.UU. y Canadá. Porque estos tratados proporcionarían un poder sin precedentes a las empresas multinacionales y el capital financiero. Los riesgos serían: la pérdida de más de un millón de empleos directos, mayores recortes salariales, una ola de privatización de los servicios públicos y la eliminación de normas ambientales así como un ataque a los derechos de las y los trabajadores.
Para expresar esta oposición, una alianza de más de 230 movimientos sociales, sindicales y organizaciones ciudadanas que luchan por la justicia social y ambiental, de 20 países europeos, registró la Iniciativa Ciudadana Europea. El objetivo es contribuir a un debate público y democrático sobre las negociaciones y sus consecuencias. También se quería conseguir la suspensión de las negociaciones de los tratados UE-Estados Unidos y UE- Canadá.
La Iniciativa Ciudadana Europea es una de las pocas posibilidades para que la ciudadanía tenga el derecho formal de presentar peticiones sobre los procesos de toma de decisiones de la UE que a menudo son absolutamente antidemocráticos. La Iniciativa Ciudadana Europea debería recoger por lo menos un millón de firmas de 7 o más Estados de la UE para obligar a la Comisión a responder formalmente a su solicitud y realizar una audiencia pública en el Parlamento Europeo.
«La decisión de la Comisión Europea es escandalosa. Estos tratados comerciales ya se enfrentan a la oposición sin precedentes por su secretismo y opacidad, pero ahora se nos niega incluso el derecho de petición. Lo que muestra el carácter antidemocrático de las instituciones de la UE que solo representan el poder económico y financiero» denuncia la campaña «No al Tratado Transatlántico de Comercio e Inversión».
Pero advierten: «Nada podría mostrar mejor que estas negociaciones comerciales son un desastre para la democracia y la población. La oposición y el poder popular no temen al poder corporativo ni a las instituciones de la UE – vamos a luchar en contra de esta decisión, y vamos a derrotar a estos acuerdos comerciales».
Se puede leer la negativa de la Comisión Europea de la Iniciativa Ciudadana Europea:
http://ec.europa.eu/citizens-