El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, ha pedido este jueves al régimen de Israel que respete la ley internacional y frene la construcción de asentamientos en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén (Al-Quds).
Ban se ha mostrado «profundamente preocupado» por el anuncio de llevar a cabo nuevas construcciones, así ha declarado en un comunicado Stéphane Dujarric, portavoz del máximo responsable de la ONU.
Asimismo ha agregado que, en base al derecho internacional, la construcción de nuevos asentamientos en los territorios ocupados es ilegal.
De hecho, el secretario general de la ONU ha exigido que las partes «eviten tomar medidas unilaterales que reduzcan las oportunidades de alcanzar un acuerdo de paz».
Por su parte, la jefa de la Diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, al expresar su profunda decepción al respecto, ha exhortado al régimen usurpador a revertir la decisión y concentrar los esfuerzos hacia un pronto reinicio de las negociaciones de paz palestino-israelíes.
En la jornada de este jueves, el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, ha anunciado la construcción de 1800 viviendas en territorio palestino ocupado, justo después de que Uri Ariel, ministro de vivienda y construcción, informó el miércoles de la construcción de 1500 casas ilegales en estos territorios; medidas que se toman en represalia por la formación del Gobierno de unidad nacional palestino.
Palestina ha advertido que llevará al Consejo de Seguridad y la Asamblea General de Naciones Unidas esta última escalada en el número de asentamientos ilegales israelíes.
Basándose en un acuerdo de reconciliación, firmado el pasado 23 de abril, el Movimiento Palestino de Liberación Nacional (Al-Fatah) y el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) formaron el lunes un Gobierno de unidad nacional.
La continua expansión de asentamientos israelíes en territorios de Palestina, ocupada ilegalmente según el derecho internacional, ha supuesto un gran obstáculo para los esfuerzos por establecer la paz en Oriente Medio.
Más de medio millón de israelíes viven en unos 120 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación de los territorios palestinos en 1967 en Cisjordania, incluido Al-Quds (Jerusalén).