A pocos días del comienzo de la Copa Mundial de Fútbol FIFA 2014, que se realizará del 12 de junio al 13 de julio, en 12 ciudades brasileras, las organizaciones se articulan para intentar recuperar el tiempo perdido y construir una red de protección de niños y adolescentes. La orden general es mantener una guardia que asegure la investigación y protección ante casos de violación a los derechos de esas personas.
Durante la organización del megaevento, los niños y adolescentes estuvieron fuera del foco, priorizándose demandas de infraestructura. No hubo ninguna acción de prevención para evitar que niñas y niños quedaran sujetos de ser víctimas de explotación sexual, trabajo infantil, tráfico o desaparición de personas, especialmente en un período en que habrá una intensa convivencia con el turismo internacional, históricamente vinculado a este tipo de delito en Brasil.
El último 7 de junio, por ejemplo, el Ministerio Público del Trabajo (MPT/CE) y la Superintendencia Regional del Trabajo (SRTE/CE) detectaron flagrante trabajo infantil en cruces de cuatro avenidas de la ciudad de Fortaleza, Estado de Ceará. Fueron identificados cinco niños (de 10 y 11 años) y ocho adolescentes (de 12 a 16 años) en situación de trabajo, la mayoría vendiendo productos relacionados con la Copa Mundial de Fútbol Fifa 2014.
Corriendo contra el tiempo, la Secretaría de Derechos Humanos de la Presidencia de la República, en asociación con organizaciones diversas de Brasil, estableció la Agenda de Convergencia para intentar realizar un trabajo conjunto en el país. La orientación es calificar al personal en tiempo hábil y realizar guardias durante todo el evento, que atiendan las demandas de violación en contra de ese público.
En entrevista con Adital, Juliana Andrade, supervisora del Núcleo de Defensa de los Derechos del Niño y del Adolescente de la Defensoría Pública del Estado de Ceará, que adhirió a la Agenda de Convergencia, reconoce que la intensificación del turismo internacional en Brasil presenta riesgos de violación de los derechos de esa parte de la población brasilera. «Esta cuestión viene con el turismo mundial, viene a potenciarse. [Garantizar la protección de la infancia y de la adolescencia] es responsabilidad del Estado, de la familia y de la sociedad”, enfatiza.
La defensora indica que se realizará un trabajo integrado entre comisarías, foros, juzgados y consejos tutelares. «Es necesario que las autoridades tengan una mirada diferenciada sobre esta cuestión. También tenemos nuestra responsabilidad y debemos estar atentos”, afirma.
Inversión de prioridades
Una de las ciudades sede del Mundial, Fortaleza, tiene una red de atención a niños y adolescentes víctimas de violencia sexual desestructurada y sin priorización presupuestaria. Según evalúa el Centro de Defensa del Niño y del Adolescente (Cedeca), será en la Copa del Mundo cuando más se violarán los derechos humanos de esa parte de los brasileros.
Esto sucede por la inversión de prioridades en lo que respecta a la inversión pública y el alto índice de infracción a derechos básicos de la población. «Destinar los recursos públicos para obras previstas en la Matriz de Responsabilidad acordada con la FIFA en detrimento de destinar recursos para políticas de atención básica como vivienda, salud y educación”, señala.
Además, el Cedeca indica que contribuyen a un cuadro de riesgos y daños la reducción de los días lectivos para adecuación al calendario de la Copa, casos de violencia policial, detenciones y aprehensiones arbitrarias en los procesos de movilización masiva de manifestaciones en contra de la realización del evento en Brasil. Para los jóvenes, se suma la estructura de redes de explotación sexual de niños y adolescentes y de tráfico de personas, entre otras violaciones.
«En este contexto, niños y adolescentes son la parte más impactada: en los procesos de remoción forzada, son los sujetos más afectados, por el vínculo establecido con la comunidad y la escuela; la violencia policial, con una intensificación de la criminalización de la juventud pobre a través de la estigmatización de los jóvenes acusados de infracciones por el aumento en el número de internaciones y el aumento del número de víctimas de explotación sexual, una de las más preocupantes violaciones, intensificada en el contexto de realización de un megaevento deportivo”, analiza la entidad.
Historial de violaciones
Para la Articulación Nacional de los Comités Populares de la Copa (Ancop), la primera violación contra los derechos de los niños y adolescentes fue cometida por el propio gobierno federal que, seguido por los gobiernos estaduales, decretó vacaciones en toda la red pública escolar durante el evento deportivo, sin supervisión pedagógica o programación especial, con el pretexto de evitar un mayor tráfico en las ciudades sedes. La Ancop ha alertado que, durante ese período, los estudiantes se quedarán sin acceso a la merienda y sin la protección de los padres, ya que éstos continuarán trabajando.
Tal vulnerabilidad convierte en accesibles a niñas y niños para las mafias embaucadoras. «Durante la Copa, serán invitados a acompañar a los turistas en partidos, en las fan fests, en paseos por la ciudad. Serán invitados a la promoción de remeras autografiadas, se les prometerán fotos con los cracks de todo el mundo. La invitación de la explotación sexual es siempre tentadora”, expone.
La Articulación viene exigiendo que se realicen campañas en toda la red hotelera, dentro y fuera de los estadios, en puntos turísticos y difundidas por red nacional y en horario principal, alertando que la explotación sexual de niños y adolescentes es un delito. Ha defendido también que ese grupo participe en manifestaciones sin sufrir abusos de la represión policial; que haya integración entre las policías para disminuir la actuación de las grandes mafias de explotación y tráfico de personas; apertura de las escuelas de la red pública y realización de actividades de integración con los alumnos y la comunidad, entre otras cuestiones.
En entrevista con Adital, Marcos Dionísio, miembro de la Ancop y del Comité Popular de la Copa de la ciudad de Natal, Estado de Río Grande do Norte, cuenta que la preocupación inicial era que el legado de la Copa para niños y adolescentes fuera el fortalecimiento de la red de protección que involucra sus derechos. Lo que hubo, sin embargo, fue no sólo la exclusión de ese debate por parte de la organización del megaevento sino también la violación de algunos de los derechos básicos de esa parte de la población. «Fuimos muy poco escuchados durante esa organización. Es lamentable que todo vaya a ocurrir improvisadamente”, evalúa.
Dionísio, sin embargo, llama la atención sobre una conquista en la conciencia ciudadana de ese público durante los preparativos para la Copa. Niños y adolescentes participaron, junto con sus familiares, de resistencias relativas a otras cuestiones, especialmente en lo que tiene que ver con amenazas de remociones de familias en todo el país.
«Hubo un papel importante de los niños y adolescentes en estas conquistas. Ellos acompañaban a sus padres y consiguieron concebir algunas cuestiones, se portaron como sujetos de derechos. Hubo un verdadero proceso de formación política”, destaca. En Natal, la resistencia popular impidió la expropiación de 1.378 residencias para obras de infraestructura del Mundial.
NÚMEROS
* Según la Red ECPAT Brasil, coalición de organizaciones de la sociedad civil que trabaja para la eliminación de la explotación sexual de niños y adolescentes, vinculada al gobierno federal, de las 275.638 denuncias de violaciones de derechos de niños y adolescentes realizadas entre mayo de 2003 y marzo de 2011, en las 12 ciudades que serán sede de la Copa del Mundo por el Disque 100, 27.664 se concentran en la explotación sexual, una de las más graves formas de violación de derechos.
* Relevamiento del Observatorio de Violaciones de Derechos de Niños y Adolescentes señala que, durante la Copa de las Confederaciones, realizada en junio y julio de 2013 en Brasil, se registraron 125 casos, de los cuales, 79 eran violaciones de derechos y 46 infracciones efectuadas por adolescentes.
* El trabajo infantil fue la principal violación, seguido de negligencia o abandono. Las infracciones efectuadas por adolescentes fueron significativas, y se destacaron el robo, el hurto y el tráfico de drogas. Y éstos son sólo números oficiales.
Denuncie
En casos de violación de los derechos del niño y del adolescente, Disque 100.