Cuba propuso en Naciones Unidas un plan con 10 acciones concretas destinadas al desarme nuclear, para su consideración el año próximo durante la Conferencia de Revisión del cumplimiento del Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (TNP).
La isla presentó la iniciativa en la Tercera Reunión del Comité Preparatorio del foro de 2015, encuentro que concluye este viernes tras dos semanas de sesiones.
Sobresale en la agenda para despejar el peligro que constituyen los mortales artefactos el comienzo de negociaciones, inmediatamente después de la Conferencia de Revisión, de cara a un convenio que prohíba en un marco de tiempo específico su posesión, producción, compra, prueba, almacenamiento y transferencia.
Esta propuesta, que encabeza el plan, incluye además la erradicación del uso o la amenaza del uso de los medios atómicos de exterminio masivo, ante la existencia en el planeta de miles de ojivas, muchas de ellas listas para su empleo.
Las medidas presentadas aquí recogen que todos los países poseedores de armas nucleares se comprometan de manera legalmente vinculante, incondicional e irrevocable ante los 190 estados partes del TNP a no utilizar sus arsenales.
También demandan un inmediato e incondicional cese de los ensayos nucleares y el cierre de los lugares dedicados a los mismos, del empleo de nuevas tecnologías para mejorar los artefactos disponibles y de las investigaciones y proyectos encaminados a modernizarlos, todo esto de forma irreversible y verificable.
La iniciativa cubana refleja además la prohibición de la carrera armamentista en el espacio exterior y la exclusión de las políticas y doctrinas de seguridad del empleo o la amenaza de empleo de los mortales medios de exterminio.
El plan presentado por la isla insta al pleno respaldo de la Resolución 68/32 de la Asamblea General de Naciones Unidas, que siguió a la Reunión de Alto Nivel sobre Desarme Nuclear celebrada el año pasado, foro desarrollado a partir de una propuesta de La Habana apoyada por el Movimiento de Países No Alineados.
La citada resolución llama a negociaciones urgentes para una convención que prohíba la posesión, producción, compra, prueba, almacenamiento y transferencia de armas nucleares, convoca a realizar antes de 2018 una conferencia internacional de alto nivel de la ONU para revisar los avances en materia de desarme y designó el 26 de septiembre Día para la Total Eliminación de las Armas Nucleares.
En la reunión preparatoria que culmina hoy, Cuba defendió que la eliminación y prohibición total de los letales artefactos es la única salida realista de la amenaza que representan para la humanidad esos medios de exterminio.
El TNP fue abierto a la firma en 1968 y puesto en vigor dos años después, y establece la celebración cada cinco años de una Conferencia de Revisión para analizar el cumplimiento del mismo.