Detalles filtrados de un informe del Senado todavía clasificado sobre el programa de tortura y rendiciones extraordinarias de la era George W. Bush, demuestran que la CIA engañó a la población sobre el alcance del abuso hacia prisioneros y la inteligencia adquirida como resultado. Según el Washington Post, los investigadores del Senado han concluido que la tortura de la CIA no produjo ninguna información acerca de los principales líderes de Al Qaeda, y particularmente nada que los llevara al descubrimiento y la muerte de Osama Bin Laden. Un funcionario estadounidense con conocimiento del informe dijo: “La CIA describió que [su programa]… consiguió inteligencia única, inalcanzable por otras vías, que ayudó a desbaratar complots terroristas y a salvar miles de vidas. ¿Era realmente cierto? La respuesta es que no”. En ciertos casos, los agentes de la CIA continuaron torturando prisioneros, aun después de que se decidiera que no tenían más información que aportar. El informe también expone las tácticas de tortura previamente no reveladas, entre ellas sumergir repetidamente a los prisioneros en tanques de agua helada. El informe ha desatado un enfrentamiento público entre la CIA y el Comité de Inteligencia del Senado, con acusaciones hacia la CIA por espiar el trabajo del panel. El Comité de Inteligencia votará esta semana si recomendará la desclasificación del resumen y las conclusiones principales del informe.