El presidente de Estados Unidos se refirió a la crisis de Crimea, dijo que nuevas sanciones podrían afectar a Rusia y llamó a la unidad de Occidente.
Durante su visita a Bruselas, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dio un discurso en el Centro Bozar de Bellas Artes de la capital belga, donde se refirió este miércoles (26.03.2014) a la actualidad política. Entre otras cosas, descartó que el mundo ingrese en una nueva Guerra Fría, dijo que era posible que se profundizaran las sanciones contra Rusia y llamó a la unidad de Occidente para hacer entrar en razón a Moscú.
“Si los líderes rusos continúan su rumbo actual, se profundizará el aislamiento y aumentarán las sanciones. Los líderes rusos atacan verdades que hace semanas se daban por obvias: que en el siglo XXI las fronteras de Europa no pueden ser remarcadas con violencia” destacó en su presentación, ante decenas de invitados. Aseguró que la defensa del derecho internacional es un motivo para que Estados Unidos se involucre en el conflicto.
“Sinceramente, si nos atuviéramos simplemente a nuestros intereses, miraríamos hacia otro lado”, afirmó el líder estadounidense, quien recordó que ese país no tiene relaciones comerciales con Ucrania ni sus ciudadanos se ven amenazados. “Pero una indiferencia de ese tipo ignoraría las lecciones que se escribieron en los cementerios de este continente”, señaló en referencia a las dos guerras mundiales.
Nadie puede pisotear a nadie
El mandatario dijo no saber qué ocurriría ahora con Ucrania, pero que confía en que habrá una solución diplomática. “Estoy convencido de que finalmente triunfarán las voces a favor de la dignidad humana, de los derechos universales y del poder de la ley”, sostuvo. Asimismo, descartó que la situación actual suponga un retorno a la Guerra Fría que dividió al mundo hace décadas.
“A diferencia de lo que ocurría en la Unión Soviética, Rusia no lidera un bloque de países, una ideología global. No estamos en una nueva Guerra Fría”, dijo Obama, que afirmó que ni su país ni la OTAN buscan entrar en conflicto militar con Rusia. Por ello, sostuvo que este país no será expulsado de Crimea por la fuerza, pero hizo un llamado a permanecer unidos para que “con el tiempo, el pueblo ruso reconozca que no puede lograr la seguridad y la posición que busca a través de la fuerza bruta”.
El jefe de Estado recalcó que las ambiciones de un país no justifican un accionar como el planteado por Moscú. “No se puede pisotear a los vecinos. Que Rusia y Ucrania no tengan una profunda historia conjunta no significa que Moscú pueda dictar su futuro”, dijo Obama. Y ante las comparaciones realizadas por Rusia con lo ocurrido en Kosovo o Irak, Barack Obama se limitó a responder que “ninguna propaganda puede convertir en correcto algo que el mundo sabe que está mal”.