Por Gabriela Ramirez.-
Aunque las mujeres en América Latina van llegando, lentamente, a posiciones políticas, en los últimos 14 años se verifica en ellas mayor incidencia de la pobreza; no se ha logrado reducir como se pensó la mortalidad materna y todavía enfrentan rasgos preocupantes de discriminación y exclusión, porque los gobiernos no han sido diligentes en establecer la igualdad como un compromiso social.
Las llamadas metas del milenio, adoptadas en el año 2000 en Naciones Unidas, sí consiguieron algunos logros en esta región, como el de la educación para niños y niñas y la disminución de la mortalidad infantil, pero hay huecos y pendientes.
Lograr la igualdad de género sigue siendo un desafío en los países de América Latina, dijo Sonia Montaño, directora de la División de Asuntos de Género de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), desde Chile.
Mediante una teleconferencia, la intervención de Montaño se transmitió en la Consulta Regional para América Latina y el Caribe, previa al 58 período de sesiones de la Comisión para la Igualdad Jurídica y Social de la Mujer de la ONU (CSW).
La reunión tuvo lugar en la capital mexicana los días 6 y 7 de febrero, con la participación de representantes de 32 países de la región, para analizar los desafíos y logros en la aplicación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) para las mujeres y las niñas.
La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres de México, Lorena Cruz advirtió que «las mujeres y las niñas no pueden esperar más, necesitan políticas públicas y están esperando que sus gobiernos y las organizaciones se unan para trabajar por un bien común».
Cruz, anfitriona de la reunión de consulta regional, agregó que en México se reconoce que la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres son requisitos indispensables para alcanzar un desarrollo verdaderamente sostenible. No obstante, hay que continuar con un trabajo transversal y nuevas rutas de empoderamiento para ellas.
Montaño, en tanto, diagnosticó que a pesar de que en América Latina aumentaron las políticas públicas en beneficio de las mujeres y las niñas, no ha sido suficiente. En los últimos años, se han reducido los niveles de pobreza en la región; sin embargo, las mujeres en el rango de 20 a 59 años (edad productiva) son más pobres ahora pues comparadas con los varones de edad similar, su nivel de pobreza aumentó 30 por ciento.
En la consulta participaron Ministras de la Mujer, miembros del cuerpo diplomático acreditado ante la Organización de Naciones Unidas, sociedad civil, Agencias de Naciones Unidas de los Estados de América Latina y el Caribe y representantes de 32 países de la región.
Allí se analizaron los obstáculos a los que se han enfrentado los gobiernos para lograr la implementación de los ODM y se elaboró una declaración regional sobre los temas de interés en la región para que sea plasmada en las conclusiones de la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer.
Al respecto, Lorena Cruz señalo: «A un año de llegar al plazo final para alcanzar las metas establecidas, es indispensable preguntarnos sobre los desafíos enfrentados y los logros alcanzados. Queremos llegar unidos, con una posición que beneficie a las mujeres y niñas de la región entera».
ODM: avances y retos
Los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) fueron acordados por todos los países reunidos en la Cumbre del Milenio y el plazo de cumplimiento para casi todos es 2015.
Dichos objetivos son: la erradicación de la pobreza y el hambre; lograr la enseñanza primaria universal; promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres; reducción de la tasa de mortalidad infantil; mejoramiento de la salud materna, combate del VIH/sida, malaria y otras enfermedades; sostenibilidad del medio ambiente, y fomento de una alianza mundial para el desarrollo
La región de América Latina y el Caribe ha alcanzado metas como la reducción del número de personas en pobreza, que en 2012 fue de 167 millones, un millón menos que en 2011; o la reducción a la mitad los niveles de pobreza extrema, ] según cifras de la CEPAL.
De igual forma, se ha ampliado el acceso a la enseñanza primaria, donde la matricula ha crecido de 88 por ciento en 1990 a 95 por ciento en 2011 y se ha conseguido la paridad entre niños y niñas,según el Informe de Naciones Unidas de 2013.
La región también está próxima a alcanzar el objetivo de reducir la tasa de mortalidad infantil, después de que entre 1990 y 2011 la tasa de defunciones de niños menores de cinco años disminuyó 64 por ciento.
Sin embargo, hay retos en el cumplimiento de los ODM para las mujeres y las niñas. Por ejemplo, la mortalidad materna en el Caribe sigue siendo alta, con una tasa en 2010 de 190 defunciones maternas por 100.000 nacidos vivos y de 72 defunciones maternas por 100.000 nacidos vivos en el resto de América Latina, según datos de igual año.
Los niveles de maternidad entre las adolescentes siguen siendo elevados. La tasa de maternidad, que en 1990 era de 92 nacimientos por cada 1.000 jóvenes, recientemente disminuyó a 80 en 2010.
Una de cada dos mujeres en la región no trabaja, lo cual equivale a una tasa de participación en el mercado laboral de solo 49,8 por ciento, mientras que la de los hombres es de 78,7 por ciento.
Alejandrina Germán, ministra de la Mujer de República Dominicana y presidenta de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, señaló que es necesario establecer una agenda política más concreta y cercana, asumir compromisos para implementar políticas públicas eficaces que garanticen una mayor participación de las mujeres.
Moni Pizani, directora de ONU Mujeres para América Latina y el Caribe, recalcó que es urgente construir una nueva agenda en la que la transversalidad de género sea centro del diseño y la implementación.
«Debemos demostrar que la igualdad es indispensable para lograr el desarrollo de cualquier país; debe existir voluntad política, instituciones sensibles al tema y transparencia. Debemos trabajar en las causas estructurales que impiden el empoderamiento de las mujeres en la región y en todo momento involucrar a hombres y niños para hacer efectiva esta igualdad», puntualizó Pizani.
Recomendaciones
Al término de la Consulta, Ministras de la Mujer y Autoridades de Alto Nivel responsables de las políticas públicas a favor de los derechos humanos y el empoderamiento de las mujeres y las niñas en América Latina recomendaron crear un entorno propicio para la igualdad entre los géneros y los derechos de las mujeres y las niñas; inversión económica y social para la igualdad entre los géneros, en estadísticas de género y desagregadas por sexo; y participación y rendición de cuentas.
El 58 período de sesiones de la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW) tendrá lugar del 10 al 21 de marzo de 2014, y ahí se revisarán los logros y desafíos en la adopción de los Objetivos de Desarrollo del Milenio para alcanzar la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres y la definición de la Agenda de Desarrollo Post 2015.