Ante las agresiones y difamaciones recibidas, creemos necesario responder a la nefasta operación política disfrazada de noticia, en la que se nos acusa de haber intentado banalizar las políticas de memoria implementadas en el Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex ESMA).
Desde hace más de 35 años, los organismos de derechos humanos creemos en la política como herramienta para luchar por el juicio y castigo y para mantener viva la memoria para nuestro pueblo. No recuperamos los ex centros clandestinos de detención, tortura y exterminio para hacer un duelo personal. Por eso, estamos convencidos de que los espacios de memoria no nos pertenecen sólo a nosotros: son de todos y todas.
Como H.I.J.O.S., tenemos 18 años de historia y no vamos a permitir que nadie manche nuestro nombre y nuestra reivindicación de la lucha de nuestros padres y madres. Siempre hemos militado por la justicia y hemos reconocido, con profundo respeto, el dolor de los sobrevivientes, como también destacamos a diario el inmenso aporte que hacen en los juicios para que los genocidas estén condenados y presos.
La ESMA fue un centro clandestino de detención, tortura, exterminio y apropiación de niños: eso no está en discusión para ninguno de nosotros. Y hasta que no estén todos los genocidas presos no vamos a parar: vamos a seguir militando por la profundización del juicio y castigo en todo el país.
Vivimos tiempos de cambio que dan lugar a nuevos debates. Si no tuviéramos más de 400 genocidas condenados y más de 1.000 procesados, probablemente no estaríamos discutiendo el rol social que deberían cumplir los sitios de memoria. Es un debate que no pretendemos saldar de un día para el otro. Ni tampoco creemos que sea una discusión sólo de afectados directos, sino del pueblo argentino. Todas las voces son válidas. No hay una única manera de recordar, sentir y reivindicar a nuestros muertos y su lucha.
Las preguntas están abiertas: ¿qué es la memoria? ¿Qué es banalizar la memoria? ¿Memoria es tener sitios de memoria vacíos, sin actividades y con edificios que se caen?
La ex ESMA es un espacio abierto al debate. Los organismos de derechos humanos nos reunimos todas las semanas en un Directorio que siempre está abierto a escuchar las diferentes opiniones y posiciones. El lugar para debatir la memoria no son los estudios de TN y Canal 13, ni de aquellos medios que nunca escucharon al pueblo.
Nuestra posición la exponemos desde nuestro discurso y nuestra práctica. A nosotros tampoco nos fue fácil habitar este lugar, donde también estuvieron nuestros padres y hermanos. Muchos trabajamos ahí en distintas dependencias y, aunque este camino fue complejo, en estos años hemos entendido que nada se podía construir desde la tragedia, que los Espacios de Memoria no son cementerios, que debemos resignificarlos para que desde la alegría de estar vivos y dignos, puedan ser apropiados por el pueblo en su conjunto.
Por eso, para nosotros la memoria es lo que estamos construyendo colectivamente con los 700 trabajadores, los organismos de derechos humanos, los más de 150.000 visitantes al año, el Estado nacional, y el pueblo que decide participar.
No vamos a permitir que se instale un debate falso, no porque nos ofenda a nosotros, sino porque no le sirve a la sociedad. Sabemos que falta que mucha gente conozca el Espacio, entre ellos quienes nos difaman. Por eso, los invitamos a todos a venir al Espacio Memoria, a conocer qué pasa, a debatir lo que queremos que sea, a ver las dimensiones del horror y el potencial de la vida y la memoria.
En la ex ESMA hay 32 edificios y los que fueron lugar específico de cautiverio están preservados. En todo el predio se trabaja en la construcción de la memoria, y en el ex Casino de Oficiales se realizan visitas guiadas todas las semanas, más de 70.000 personas ya lo han visitado y así seguirá siendo. Nada de lo que sucede ahí es secreto u oculto, basta con entrar a la página web (www.espaciomemoria.ar) para saber quiénes estamos ahí, qué hacemos y cómo construimos todos los días.
Lo que fue la ESMA desde el año 2004, a partir de la decisión política de Néstor Kirchner, es el Espacio para la Memoria, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos. Como su nombre lo indica, se realizan diferentes actividades que promocionan y defienden los derechos humanos. Ahí, entre otras cosas, funciona la Tecnicatura de Música Popular en el edificio de Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora, de donde justamente salían los tambores que tanto horrorizaron a dos sobrevivientes. Tamaña paradoja: ese día, los estudiantes estaban ensayando una canción que luego sería presentada en el acto de las Madres, Familiares y Abuelas por el Día del Detenido-desaparecido en el Teatro La Máscara.
Clarín y La Nación instalaron como «noticia» algo que sucede todos los días. Todos los días en el Espacio Memoria se trabaja, se estudia, se debate, se milita, se reúnen los cartoneros de Núñez, se hacen visitas guiadas, talleres para escuelas, actividades de memoria y homenaje, los trabajadores y visitantes almuerzan, toman mate, ríen, lloran, como parte de la vida, que es lo que hoy sucede en el Espacio. Esta operación política es una más de la lista que tienen los monopolios para atacar a las políticas oficiales de Derechos Humanos sostenidas desde hace 10 años.
Hubiéramos preferido ver tantas noticias en esos medios masivos sobre los juicios a los genocidas, la búsqueda de nuestros hermanos apropiados y la de los cuerpos de los 30.000 compañeros detenidos-desaparecidos, sobre el ejemplo mundial que es nuestro país por las luchas populares contra la impunidad y por las políticas de Estado de Memoria, Verdad y Justicia.
NO OLVIDAMOS
NO PERDONAMOS
NO NOS RECONCILIAMOS
H.I.J.O.S. Capital
Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio