«Queremos naturaleza pero también queremos sacar al pueblo ecuatoriano de la pobreza”, dijo el presidente de Ecuador, Rafael Correa, en referencia a la decisión de poner fin a la iniciativa Yasuní-ITT.
«Hemos perdido 500 años para luego vivir. Cada día que nos demoramos son vidas que se pierden, hemos perdido siglos para el desarrollo”, agregó Correa en el programa ‘Diálogo con el Presidente’, organizado por RT y otros medios internacionales.
Anteriormente el Gobierno ecuatoriano anunció que eliminaría la iniciativa ambientalista debido a que «el mundo no ha contribuido” con el proyecto destinado a proteger un sector de la selva amazónica y dejar bajo tierra un importante yacimiento petrolífero a cambio de una compensación económica.
«El Yasuní va a continuar, pero la pobreza debe desaparecer, el Yasuní es un éxito, mientras que la pobreza es también un atentado, el mayor atentado contra los derechos humanos», subrayó Correa.
Además «nos hemos comprometido de minimizar al menos del 1% de Yasuní-ITT por más de 18.000 millones de dólares. No es como lo quieren presentar algunos».
«La dignidad del país no está a la venta (…) no tenemos que dar explicaciones a nadie. Todo país puede y debe usar sus recursos naturales responsablemente, no nos obliguen a retroceder en la historia», acentuó el mandatario.
«Chevron hizo mucho daño a Ecuador y lo sigue haciendo”
En cuanto al sonado litigio con la compañía estadounidense Chevron por daños ambientales en la amazonia ecuatoriana, el jefe de Estado dijo que esa petrolera «hizo mucho daño a Ecuador y lo sigue haciendo».
La empresa estadounidense fue obligada en 2012 por un tribunal de Ecuador a pagar una multa de 19.000 millones de dólares, sin embargo, Chevron apeló la sentencia y recurrió a una corte de Nueva York y de La Haya contra Quito, con el objetivo de que la nación sudamericana asuma la indemnización por la contaminación.
«En EE.UU. nos pueden hacer pedazos… nos pueden hacer mucho daño”, añadió Correa. «El arma más eficaz en la historia para enfrentarse a las grandes potencias es la verdad. Luchar contra el imperio del capital es el gran desafío de nuestro tiempo. El gran desafío del siglo XXI es vencer al gran capital”.