Hoy en Segmenler Park (a pocos kilómetros de GuvenPark, otro parque de Ankara donde se organizan regularmente Asambleas populares) se desarrolló una Asamblea temática, con alrededor de cincuenta participantes entre los que se contaron algunos ‘expertos’ invitados para explicar la ley electoral actualmente vigente en Turquía.
Todos los participantes estuvieron de acuerdo en el hecho que la ley electoral actual es poco democrática y se hizo para facilitar la mantención del poder por parte de los mayores partidos y para obstaculizar a las minorías.
De hecho esta Ley considera un umbral de elegibilidad del 10% que impide a los partidos pequeños la representatividad en el Parlamento.
Asambleas en Segmenler: todos los domingos a las 17.00 horas
En el mismo barrio de Segmenler Park he visitado hoy el Kugulu Park (Parque de los cisnes) donde hasta el mes pasado se habían instalado las carpas con cientos de personas acampando, en el estilo del movimiento español 15M y del movimiento norteamericano ‘Occupy’ (sólo para dar un par de ejemplos de este nuevo fenómeno social que desde el 2011 si está difundiendo en todos los continentes).
Acá hay actualmente un homenaje permanente para recordar a los muchachos que mató la violencia policial.
Pude hablar en inglés con algunos muchachos del movimiento turco. Pude ‘sentir’ el mismo tipo de energía positiva que he ‘sentido’ en otros lugares y constatar cuantas semejanzas existen entre los movimientos de los diversos países: el rechazo de la violencia en todas sus formas, el rechazo a los líderes y las organizaciones políticas y sindicales, la aspiración por una Democracia Real, por el respeto a las minorías y por una organización social que devuelva el poder de decisión a las manos de la gente … en síntesis la aspiración por la libertad y la felicidad para todo ser humano.
Más que ideas abstractas son sentimientos. Un modo de ‘sentir’ que es propio de una ‘nueva sensibilidad’ que se está desarrollando en todo el mundo.
Es interesante notar que estos movimientos con características tan similares (entre las que destaca la metodología de asambleas, que apunta al desarrollo de la inteligencia colectiva) están explotando en países muy distintos entre ellos.
Desde naciones ‘poco democráticas’ como muchos de los países del norte de África y del Medio Oriente, hasta ‘democracias formales’ como España, Grecia, Estados Unidos, Israel, etc.
Las diferencias son enormes.
También la situación económica es muy variable. Se pasa de países en fuerte crisis recesiva a otros en pleno desarrollo económico, como Turquía y Brasil, que son los ejemplos más recientes de estas súbitas explosiones psicosociales. Por lo tanto no se puede creer a quienes decían que estos fenómenos son una simple consecuencia de la crisis económica. No es ‘simplemente’ un problema económico.
Todo esto, a pesar de la infaltable respuesta violenta de los varios gobiernos en el poder (tan diversos entre ellos y tan similares en la violencia con que reaccionan frente al cambio) permite presagiar el desarrollo de la nueva sensibilidad y el nacimiento de un Nuevo Mundo basado en una nueva organización social: no-violenta y con el ser humano como valor central.
(nuestro corresponsal en Turquía nos ha solicitado no revelar su nombre por razones de seguridad)