El Sistema es Abortivo

 Por Livia Gracola

No entiendo. ¿Hay algo de lo que me perdí? ¿Algo de lo que no me informé adecuadamente?

Escuchando las preguntas cargadas de –responsabilidad- que formulaban los integrantes de Tolerancia Cero, tiendo a imaginar que en Chile hubo un cambio radical en la paternidad.

Es como para pensar que todos los hombres sin excepción usan condón, porque entienden que la responsabilidad de un embarazo no recae sólo en la mujer. Que todos pagan mensualmente una cantidad suficiente para la manutención de sus hijos/as, en el caso de que estén separados. Que todas las tardes llegan a su casa primero que nada, a conversar con ellos/as y a colaborar con las tareas, tanto domésticas, como de los estudios.

Sin embargo, lo que acabo de describir está bastante alejado de lo cotidiano y al parecer existe una realidad que los señores toleranciacero desconocen.

El aborto se gesta mucho antes de que concrete. El aborto se gesta en una sociedad que sufre una aberrante injusticia social. Este sistema es abortivo. Veamos sólo algunas cifras:

  • 219 mil niños/as realizan trabajo prohibido.

  • 94 mil, son menores de 14 años.

  • El 70% de los niños y niñas sufren violencia en sus propios hogares.

  • Los niños/as representan un 27% de la población y un 41,2% son pobres.

  • Sólo en 2011, 57 niños fueron asesinados en nuestro país.

  • Un número no cuantificado de niños/as sufren hacinamiento, hambre, desnutrición, abandono, vulnerabilidad, violencia sicológica, obligación de prostituirse, enfermedades de transmisión sexual.

Hacia estas nefastas cifras debiera existir tolerancia cero. Si el discurso es la defensa de la vida, estos niños y niñas viven. Sí, y viven en nuestro país. Allí están, esperando que esa declamación de defender la vida, cobre coherencia, sentido y realidad.

Qué ocurre con las mujeres:

  • La jefatura femenina se ha duplicado en los últimos veinte años.

  • Un 39% de las mujeres son Jefas de Hogar.

  • Un 55% de mujeres Jefas de Hogar corresponde al nivel de Extrema Pobreza.

  • En el caso anterior, esos hogares dependen de un solo ingreso.

  • La participación laboral de las mujeres en el 10% más pobre corresponde al 24%, siendo en el 10% más rico, de un 63%.

Nada más hipócrita que discutir sobre aborto mirando la situación como una fotografía publicitaria, a través de preguntas tendenciosas y nimbadas de machismo moralizante, configurando siempre de soslayo la obligación de la mujer de cumplir con ese mandato decimonónico de la maternidad a como dé lugar. El castigo, la privación de libertad, la penalización no terminará con la práctica del aborto en una sociedad con tremendas desigualdades y aquí las mujeres tenemos todo el derecho a decidir.

“No cabe duda que discutir sobre aborto, recubre una gravedad extrema al tocar éticamente una pregunta por la autonomía de la mujer y las formas de ejercicio de poder y de control sobre su cuerpo” (Raquel Olea, feminista chilena).

Les recomiendo informarse más ampliamente a través del Documento de Consenso “Despenalización del Aborto en Situaciones Biopsicosociales Calificadas en que se Vulneran Gravemente los Derechos de las Mujeres”.(www.mileschile.cl)

Fuente:

* Observatorio Niñez y Adolescencia

* UNICEF

* Ministerio de Desarrollo Social.